La asociación alemana de Cementerios de Guerra decidió en 1.980 reunir a sus muertos en territorio español, en una tumba acorde con la categoría de aquellos soldados que dieron la vida por su país. Marinos, aviadores o simples soldados de la primera y segunda Guerra Mundial, llegados a costas españolas a causa de un posible naufragio o derribo de sus aviones, estaban hasta entonces desperdigados por todo el territorio español. La mayoría procedían de buques, aviones o submarinos alcanzados durante la guerra y que de una u otra forma llegaron a nuestras costas. Siguiendo la costumbre de la VDR, ninguno de ellos fue repatriado y fueron enterrados en lugar próximo al de fallecimiento.
De hecho son cientos los cementerios que este organismo tiene repartidos por todo el mundo.
Decididos a reunir en un solo lugar a todos los soldados alemanes muertos en España y por motivos de respeto a un rey común, lo hicieron en Cuacos de Yuste, un pequeño pueblo de aproximadamente 900 habitantes en la Comarca de la Vera, provincia de Cáceres y a tan solo 2 Km. del Monasterio de Yuste, famoso por haber sido lugar de recogimiento de los últimos años de la vida del rey Carlos I de España y V de Alemania, así como lugar donde murió.
Los trabajos se iniciaron de inmediato y con la misma inmediatez se procedió al traslado de los restos una vez preparada la parcela al efecto, próxima al idílico lugar de recogida del viejo rey del Sacro Imperio Germánico.
La labor quedó finalizada el 14 de Noviembre de 1.982 inaugurándose oficialmente ese día por ser "Día Nacional de los Caídos de la República Federal" y con la presencia de miembros de la embajada alemana en España, autoridades españolas y más de 200 familiares de los fallecidos llegados desde Alemania en varios autobuses. Otro acto solemne tuvo lugar el 1 de Junio de 1.988, con presencia del embajador alemán y numerosas personalidades.
Las sepulturas, todas ellas iguales, solamente tienen una cruz de granito negro sin otro ornamento que la inscripción del cuerpo que custodian.
Cada una de ellas lleva el nombre del soldado que allí descansa, a excepción de ocho de esas cruces. Ante la dificultad de identificación de algunos de ellos, existen 8 lápidas con la inscripción "Ein Unbekannter Deutsche Soldad" dedicadas a soldados cuya identidad se desconoce.
En el llamado "Cementerio Alemán" quedaron pues reunidos los restos de 182 soldados alemanes. Las labores de investigación para reunir los cuerpos dio lugar a diferentes anécdotas, una de las cuales tuvo lugar en tierras cercanas al domicilio de quien escribe...
..."Un muchacho de 18 años, tripulante de un U-Boot, apareció gravemente herido en una playa de la localidad de Burriana (Castellón). Rescatado por un matrimonio que había perdido recientemente a su hijo en la guerra civil española, fue atendido por ellos hasta que finalmente falleció. Enterrado en el cementerio local, la familia que le cobijó siempre mantuvo flores frescas en su tumba como recuerdo del joven y memoria al hijo que nunca recuperaron".
EL ULTIMO CONDILL
Señor Condill, aprovecho para saludarle y felicitarle por su magnífico blog. El motivo que me trae a escribirle unas líneas econcierne
ResponderEliminaral comentario que aparece en su post 0487- CEMENTERIOS MILITARES DE ALEMANIA. En él usted cita el siguiente extracto:..."Un muchacho
de 18 años, tripulante de un U-Boot, apareció gravemente herido en una playa de la localidad de Burriana (Castellón). Rescatado por un
matrimonio que había perdido recientemente a su hijo en la guerra civil española, fue atendido por ellos hasta que finalmente
falleció. Enterrado en el cementerio local, la familia que le cobijó siempre mantuvo flores frescas en su tumba como recuerdo del
joven y memoria al hijo que nunca recuperaron". Por lo que deduzco del texto usted se refiere al marino alemán Hubert Sasse.
Realizo desde hace un tiempo una pequeña investigación sobre este caso y tenia entendido que llegó a la playa de Burriana sin vida.
Me ha sorprendido mucho saber que no fue así. Agradecería me pudiera informar sobre la fuente de su texto, para poder comprobar su
veracidad. Saludos de Jose Vicente Vaquer.
Estimado José Vicente:
ResponderEliminarCiertamente me ha costado -y mucho- encontrar la fuente de una anécdota recopilada y escrita en mi Blog año y medio atrás, pero mi pundonor me obligaba a ello. Naturalmente yo no soy inventor de mis historias, sino investigador y transmisor de las mismas. Espero no tener muchos lectores con estas exigencias. Es broma. Agradezco tu interés y el de todos mis lectores. R.F.C.
FUENTE:
http://riotinto.mforos.com/555733/6280448-cosas-curiosas/?pag=8
Saludos señor Condil. Le saludo de nuevo. Su ayuda fue bien recibida en la cuestión que le insistí sobre el marino Hubert Sasse (post 0487- CEMENTERIOS MILITARES DE ALEMANIA). Aquella historia acabó enamorándome y llevándome a la firme decisión de escribir, de contarla para quien pudiera interesar. Todos los pasos que fui dando me llevaban ante puertas que se habrían a mi paso, mostrándome nuevos pasillos por los que seguir indagando. Tenía claro que no desistiría en mi empeño hasta que no tropezara con una puerta cerrada que me impidiera seguir adelante. Espero tenga algunos momentos para dedicarlos a su lectura, y la disfrutes tanto como lo he hecho yo al construirla. Saludos de Jose Vicente Vaquer. http://blogdejosebarcelo.blogspot.com/
ResponderEliminarHola amigo: He leído tu relato con interés y quedo intrigado a la espera de los acontecimientos que puedan dar continuación al mismo. Recuerdo tiempos ya muy lejanos cuando las novelas llegaban al público "por entregas", folletos de apenas cuatro hojas que se vendían semana tras semanas haciendo las delicias del público distrayéndolo de un día a día poco esperanzador.
EliminarQuería decirte que no quedé tranquilo tras mi respuesta del 14 de Marzo, pues dejé en el tintero un dato que supongo altamente relevante. Ahora que soy consciente de tu verdadero interés en el asunto me veo en la obligación moral de dártelo. Por si no has llegado a ese punto te diré que en Mallorca vive todavía una señora (Gabriela Poppelreuter) que es quien recopiló en su día todos los datos al respecto de cada uno de los alemanes enterrados en España. Es posible que puedas ampliar tus conocimientos, un empujón a tu historia y un punto final interesante y verídico a la misma. Persevera en este y otros objetivos pues creo sinceramente que tienes alma de escritor. Un abrazo.
El cementerio se inauguró el 1 de junio de 1983, no de 1988. Así consta en la placa que hay en la entrada al mismo.
ResponderEliminarPerdona, pero no son esas las noticias que yo tengo. Hubo una primera inauguración el 14 de Noviembre de 1982, Día Nacional de los Caídos de la República Federal de Alemania; lo del 1 de Junio de 1983 fue un acto conmemorativo posterior que, por contar con la presencia del embajador alemán, se le dio el carácter de inauguración oficial y así quedó plasmado en la placa de acceso. De todas formas, en el post no dice que fuera inaugurado en 1988...
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