El emirato de Qatar, es el segundo Estado más pequeño del Golfo Pérsico, detrás de Bahreín. El país es una península, de una longitud aproximada a los 150 Km. y que ocupa un total de 11.000 Km2. Por tierra, su único vecino es Arabia Saudí ya que el resto de su perímetro lo ocupa el golfo de Arabia, también llamado Golfo Pérsico.
La mayor parte del país es una inmensa llanura desértica, totalmente estéril y cubierta de arena. Su mayor altura la brinda una cadena rocosa situada al oeste del país, que alcanza los 90 metros sobre el nivel del mar. Es justamente a lo largo de esa zona donde se encuentran los principales depósitos petrolíferos, mientras que el gas natural está situado en el mar y hacia el noroeste de la península.
Su población total está alrededor de 1.500.000 habitantes de los cuales más de la mitad viven en Doha, la capital. Al este se encuentra el famoso Khor al Aldaid o mar interior de arena.
Hasta la llegada del petróleo, la economía de Qatar giraba alrededor de la pesca y la cría de perlas aunque su economía era tan pobre que, ante la falta de moneda, hubo de marcar con un punzón monedas extranjeras. En la foto moneda 8 reales de plata de Carlos III de España.
Históricamente se cree que los primeros habitantes de la región fueron los Cananeos, a quienes desalojaron los musulmanes en el siglo VII. A partir del siglo XVIII otomanos y piratas se disputaron puntos estratégicos de la península.
La intervención de los ingleses para erradicar la piratería en la región fue la que llevó al poder a la familia al-Thani. En 1.871 Qatar fue sometida por los turcos, quedando bajo la autoridad de Basora. Aunque en 1.893 los cataríes se levantaron en armas y redujeron las presiones turcas, el territorio formó parte del Imperio Otomano hasta 1.915. Buscando protección, el emir 'Abd Allâh firmó en 1.916 un tratado con el Reino Unido que convertía el emirato en un protectorado británico.
Bajo la dirección del emir Ahmad b'Alí, al abandonar los británicos el Golfo Pérsico en 1.971, Qatar ingresó en la Liga Árabe y en la ONU pero un año después (1.971) era depuesto mediante golpe de estado promovido por su primo el jeque Hammad al-Thani quien se mantuvo en el poder hasta 1.995.
Desde esa fecha gobierna el país su hijo el emir Hamad bin Khalifa Al Thani, tras arrebatarle el poder a su padre, mientras éste se encontraba de vacaciones en Suiza. (!)
Solo un 20% de la población es de Qatar, el resto son extrajeros principalmente trabajadores de la industria petrolífera y de la construcción. Como se ha dicho anteriormente, con la llegada de la riqueza petrolífera, la mayor parte de la población catarí es actualmente urbana.
El 90% de ellos viven en Doha o en el extrarradio, lo que ha provocado la casi total despoblación de los antiguos pueblos del norte peninsular. El cultivo de perlas descendió radicalmente a mediados del siglo XX pero la riqueza del petróleo multiplicó rápidamente su población que pasó de los 28.000 habitantes de 1.940 al millón y medio actual.
Con grandes reservas petrolíferas y tercer productor mundial de gas natural, Qatar es hoy uno de los países más ricos del mundo, con una renta per cápita que roza los 100.000 $USA.
Todo allí es posible. El mar puede ser convertido en tierra firme y parte del desierto en fértil huerta. Esas cantidades ingentes de riqueza, que petróleo y gas les proporcionan, han hecho florecer grandes ciudades e inmensos paraísos de ocio, al tiempo que los antiguos pueblos fueron abandonados. La mayor parte de los antiguos beduinos nómadas, en este momento son inmensamente ricos y urbanitas.
A diferencia de otros países árabes, Qatar se ha modernizado y aunque el islam sunita lo preside todo, las mujeres no llevan velo y pueden sacarse el carnet de conducir e irse de compras sin su marido. También los extranjeros tienen libertad de culto, pero no están autorizados a promover sus religiones.
Nadar sí, pero guardando la ropa...
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