1565- DESCONCERTADOS Y EXPECTANTES.

Los españoles conocemos la corrupción política y la dejadez de nuestros gobernantes. Ante estas expectativas tan poco halagüeñas, estamos a la espera de ver que es lo que ocurre con Cataluña. Mejor dicho estamos a la expectativa de las permisibilidades que el Gobierno (y la Corona) tengan con respecto a los políticos que propugnan la independencia ilegal de una parte de territorio español. La derecha más rancia, radical como los que pretenden independizarse, pide detención de los que dirigen este movimiento y presencia de las fuerzas armadas para impedir la votación. Yo no creo que llegue a necesitarse tanto, pero...

Otros son menos beligerantes pero vienen a pedir algo parecido. Desde luego ningún español quiere que se permita la independencia de Cataluña del Estado y sin duda pondrían todas las armas a su alcance para que esto no se produjera. Cuando digo armas, digo fórmulas, pero algunos pondrían las armas también si fuera necesario. La gente nada sabe sobre la última carta que el Gobierno va a jugar en esta partida pero espera que, siendo de "derechas" y teniendo mayoría absoluta en el Congreso, pondrá todo lo que haya a su alcance para impedirlo. De no ser así la ruptura no será solamente con Cataluña sino con el Gobierno.

De permitirse lo que los independentistas pretenden, todo el pueblo español se echaría a la calle y solo Dios sabe cómo acabaría esto. Aquí hay en juego algo más que el territorio catalán. Lo que está en juego no es solamente si Cataluña queda dentro o fuera de España, sino la propia Democracia y el país en sí mismo. Si gobernando la "derecha" en mayoría absoluta, se permite la independencia de una parte de España, todo lo adelantado en estos casi cuarenta años de Democracia se habrá perdido, sin descartarse incluso un conflicto armado. 

Políticos y banqueros roban impunemente al pueblo y, para más inri, incluso se permiten robar toda una región entera. 
¿Llegaremos a ver eso?. Desde luego si se produce tamaño desatino, ya poco quedará por ver. Para hablar de conductas dictatoriales y anti-democráticas, ya no será necesario hablar de países sudamericanos. Tampoco de los muchos que existen en el continente africano. Las conductas anti-democráticas las tendremos en la propia Europa y más concretamente en el territorio español. 

Muchos como yo jamás imaginamos ver un escenario como este. Los que afortunadamente no hemos conocido la guerra, jamás imaginamos que tendríamos que verla dentro de nuestra propia casa, como sucedió en 1936. Pensábamos que los horrores de la pasada Guerra Civil Española estaban presentes en la memoria, pero parece ser que han sido olvidados. Como todos sabemos, la guerra llega cuando se olvida el pasado y el pasado más inmediato de España en tema de conflicto bélico fue una Guerra Civil. ¿Es eso lo que queremos que se repita en este país?. 

Creo que no, pero eso es lo que fomentan quienes lo provocan y quienes lo permiten. Veremos en qué queda todo esto. De momento la discriminación, la confrontación y la rabia del pueblo español, están servidas. El próximo domingo 9 de Noviembre está cerca y él marcará el destino de muchos españoles. También el de los catalanes. El emperador Julio César dijo aquello de "divide y vencerás". Pues bien, eso es lo que buscan algunos: dividir, para vencer. ¿Se les permitirá?. Veremos lo que ocurre...

RAFAEL FABREGAT