Con la caída del Muro de Berlín (o de la vergüenza), no solo quedó Alemania unificada, si no que actualmente la armonía preside las relaciones de noviazgo entre rusos y alemanes. Sin embargo, como de costumbre, tal armonía será sin duda económica que no sentimental. Cambian los tiempos, pero no el fundamento de las cosas. Como en las bodas principescas del medievo, los novios se casan por el interés de los reinos y no porque haya la más mínima pizca de amor entre ellos.
Pese a los esfuerzos de Francia y Reino Unido por conseguir que los componentes del G-8 se pronunciaran a favor de declarar una zona de exclusión aérea sobre Libia, rusos y alemanes lo han impedido. Al tomar esa determinación saben que favorecen a Gadafi y destruyen las aspiraciones de libertad del pueblo libio, pero... ¿era eso lo que querían realmente?. Pues no amigos, no. En este cochino mundo que nos ha tocado vivir, todo se mueve alrededor del dinero. Los alemanes prefieren seguir aumentando las sanciones y los rusos la exportación de gas y crudo a precios en alza.
A los libios... ¡que les zurzan! y a Gadafi también. Aquí lo que interesa es el dinero fresco y bien controlado, todo lo demás son zarandajas. Las vidas de miles de libios, que se perderán por culpa de su permisibilidad a los bombardeos del dictador, les importa a ellos un pimiento... ¿Tiene eso algún interés económico?. ¿No?. ¡Pues, entonces...!
EEUU, por una vez más honrado (!), lo deja bien claro...
- El pueblo americano está a favor de la intervención pero... En fin, no acabamos de decidirnos, ¡porque tenemos pocos intereses en Libia y nos costaría dinero...!
¿Se fijan ustedes, por donde van los tiros?. Pues eso; más clarito agua. Por su parte la ONU, a pesar de la aprobación de los países árabes para que se ponga en marcha la zona de exclusión aérea, sigue esperando el permiso del Consejo de seguridad y pruebas de la necesidad de su implantación. ¿Acaso se han vuelto ciegos, de repente?. Por el interés de unos y la permisividad de otros, el pueblo libio seguirá siendo machacado por la aviación de Gadafi.
EEUU, por una vez más honrado (!), lo deja bien claro...
- El pueblo americano está a favor de la intervención pero... En fin, no acabamos de decidirnos, ¡porque tenemos pocos intereses en Libia y nos costaría dinero...!
¿Se fijan ustedes, por donde van los tiros?. Pues eso; más clarito agua. Por su parte la ONU, a pesar de la aprobación de los países árabes para que se ponga en marcha la zona de exclusión aérea, sigue esperando el permiso del Consejo de seguridad y pruebas de la necesidad de su implantación. ¿Acaso se han vuelto ciegos, de repente?. Por el interés de unos y la permisividad de otros, el pueblo libio seguirá siendo machacado por la aviación de Gadafi.
Si nadie lo remedia, los territorios alzados contra el dictador serán recuperados por éste y los supervivientes de las bombas, masacrados en represalia a su osadía. ¿Es eso lo que nuestros democráticos gobernantes quieren?. Lo dudo y estoy ansioso por ver el interés real de tales medidas (de momento) a favor del facineroso. Caiga sobre las espaldas de quienes permiten este río de sangre, la ira de un Dios que ellos saben bien que no existe, ¡por mucho que sean ellos los que primeros en acudir a misa de doce!. De todas formas, alemanes y rusos no están solos ante la decisión de no llevar al consejo de la ONU la intervención de paralizar los bombardeos de Gadafi. Ellos se han limitado a impedir que se ponga sobre la mesa este asunto y en este día, nada más. Mañana veremos de donde sopla el viento... Los otros componentes del G-8 (EEUU, Canadá, Italia y Japón) dan la callada por respuesta, que es otra (vergonzosa) opción, igualmente válida. Lo que sigue estando claro es que los libios que buscan la libertad, venderán cara su vida y en esta misma imagen puede verse como, ante la falta de medios, se atreven incluso a disparar a la aviación de Gadafi con los escasos medios que poseen.
Falta saber, eso sí, la efectividad de armas tan rudimentarias. Sea como fuere, las pitonisas son incapaces de seguir viendo a Gadafi al mando de la nueva Libia. Pero, de momento, parece ser que los intereses de unos prevalecen sobre las vidas de otros. ¡Que caigan algunos más...! -piensan los "directores" del espectáculo. Nosotros, ya lo he dicho un montón de veces, somos los títeres. ¡Los hilos los manejan otros...! Lo ya no tan simple es pensar que personajes como el propio Presidente de los EEUU, sea también una marioneta más al servicio de esos "directores" y dueños del mundo, organismos de la máxima altura que son en verdad quienes nos gobiernan a todos. Teniendo en cuenta la premisa de que nada se mueve sin un interés concreto, siempre económico, esa es la única explicación de que ocurran muchas de las cosas que suceden cada día en el planeta.
El control y la venta de armas es una de esas cosas, como especialmente lo es el control energético y el de los recursos que todos necesitamos cada día. Está claro que ese tipo de intereses, poco tienen que ver con la presidencia de un país democrático, ni aún en el caso de que se trate de los Estados Unidos de América. Son los "directores" quienes nombran y deponen presidentes, de la misma forma que otros ponen y quitan Papas. ¡Mientras haya voluntarios al cargo...! El interés real no está en el personaje, si no en los resultados. Por lo tanto no pregunten a nadie quien hace tal cosa, porque no se trata de una persona concreta. Son varios (no tantos) y su única ilusión es controlar. Al objetivo podría llamársele "Don Control" (una especie de Dios en la tierra) aunque normalmente todos lo llaman Don Dinero.
RAFAEL FABREGAT
RAFAEL FABREGAT
No hay comentarios:
Publicar un comentario