PARA ESCRIBIR SOLO HAY DOS REGLAS, TENER ALGO QUE DECIR Y QUE TE DEJEN DECIRLO. (Rafael F. Condill)
5 de noviembre de 2010
0192- TALLERES MECÁNICOS DE CABANES.
Algunos jóvenes de nuestra localidad podrán pensar que los actuales talleres de reparación de vehículos siempre han estado ahí, pero nada más lejos de la realidad.
Ni son los primeros ni los más emblemáticos, aunque sí los que más dinero habrán facturado, eso sin duda.
De los talleres que actualmente existen en Cabanes, el primero en instalarse es el que representa a la marca Renault que, aunque carezco de datos para dar una fecha exacta, imagino yo que sería a mediados de la década de los 70. Actualmente, cos sus dueños jubilados y sin hijos que quieran seguir la profesión de sus padres, este taller está alquilado a los hermanos Parres con servicio rápido y de absoluta confianza.
En esa misma década se incorporaría José Beltrán Marzá, también en la Avda. de José Andino (actualmente Maestrazgo). No es que me haya olvidado del "Taller de Esteban" no, pero ése enlaza con la historia de los mecánicos de Cabanes y entra por tanto en la breve historia a realizar posteriormente.
El primer taller que yo conocí (1.955/60) fue el "Taller de bicicletes del tío Rufo", enfrente del Pou de les Grasses, en la calle que subía a la Plaza Sitjar desde el final de la calle del General Sanjurjo (hoy calle de La Cava). Dicho señor (el tío Rufo) era una persona muy afable, lo que propiciaba las visitas continuas a su taller de toda la chiquillería local, a pesar de que casi ningún joven tenía entonces bicicleta y menos todavía los niños.
Dado lo difícil de calles y caminos, todos de tierra y llenos de piedras y clavos, la avería principal eran pinchazos que él arreglaba con prontitud.
El parche y la soluciò, así como el papel de lija correspondiente, era todo cuanto se necesitaba para una buena reparación, aparte las llaves o palancas que servían para quitar la cubierta.
Allí pasábamos muchos ratos en las horas libres de escuela y en aquellos días que no había clase. Le gustaban los niños y él siempre nos recibía con una palabra amable, dejándonos lijar una cámara y apretar o aflojar un tornillo...
También en la calle Capitán Cortés, hoy carrer de la Font, había otro taller con la sola ocupación de reparar bicicletas, tanto es así que al propietario se le conocía popularmente como "Vicent el de les bicicletes", suegro del hermano mayor de los hermanos Tena, de la localidad.
Este señor (Vicent) ya estaba un poco más modernizado y reparaba la totalidad del vehículo, es decir, toda la bicicleta en su conjunto, incluídos frenos y cadena que alargaba o acortaba a voluntad con una herramienta que permitía la separación de los eslabones y su unión posterior. Con apenas dos coches y diez motos en la localidad, la evolución de los talleres de reparación y venta de vehículos a motor, no llegó a Cabanes hasta la década de los 60.
Hacia el año 1.965, se instalaría en la localidadf el Taller de Adolfito, en el número 2 de la calle Delegado Valera, actual almacén del Bar Tony. Posteriormente lo haría en la carretera de Zaragoza, siempre representando la marca de motos MONTESA y teniendo como aprendiz a "Enrique el de Concha" y a "Jorge el Teulé".
Muy poco tiempo después de Adolfo también se instalaría en el número 6 de la plaza del Generalísimo "Vicentico el Llebro", con la representación de la marca BULTACO. La lucha por la supremacía fue durísima entre ambos contendientes pero, aunque había disparidad de criterios y los dos vendieron gran cantidad de máquinas, se cree que la Montesa y por lo tanto "Adolfito", ganó el primer puesto en la colocación masiva de motos en Cabanes.
Llegaron también las primeras "Vespa" y "Lambretta", los primeros motocultores y algunos tractores de mayor importancia que empezaron a relevar a los mulos que había en todas las casas; la llegada del "600" y algunos coches (mayormente de ocasión) empezaron a dejarse ver por la localidad.
Unos años después Enrique el de Concha se estableció por su cuenta y abrió taller (de escasa actividad) en los bajos de la casa de su abuela, al final de la calle Delegado Valera.
Cabanes se modernizaba y los mecánicos no daban abasto.
Sin embargo los dos talleres principales no llegaron a cumplir dos décadas desde su apertura puesto que en la década de 1970, Adolfito cambió su profesión por la de camionero y "el Llebro", al casarse con una chica de la Ribera de Cabanes, se fue del pueblo e instaló su taller en Torreblanca, coincidiendo todo esto con la llegada a Cabanes de los dos mecánicos del Pla de l'Arc (Pepe y Manolo) que, como se ha dicho anteriormente, instalaron sus talleres en la Avda. de José Andino, hoy del Maestrat. También Jorge el Teulé, aprovechando el traslado de taller de la "ferrería de Oliver" a la carretera de Zaragoza, se independizó (1975/80) abriendo taller propio en ese mismo local (de José el Masové) en la calle Fray Gabriel Ripollés, enfrente de las escuelas viejas, tomando como aprendiz a Esteban el de Etiene.
Allí estuvieron trabajando más de una década, hasta que Jorge trasladó su taller (1985/90) a los terrenos de la "gasolinera" de la Ribera de Cabanes.
Esteban aprovechó la marcha de "su jefe" para establecerse por su cuenta en el mismo local y unos años después, en lo que su propio padre calificaría con "hem fet un gran esforç", montaría (1990/95) un extraordinario taller (sin duda el mejor de la localidad) en la carretera de la Ribera, a la entrada del municipio, enfrente del nuevo colegio de Primaria y Secundaria Ntra. Sra. del Buensuceso de Cabanes, con representación de la marca CITROEN. Últimamente también el hijo de "Jorge el Teulé" ha abierto taller de reparación en los bajos del bloque de pisos de la calle San José, aunque con local muy reducido.
Aparte todo lo anterior, queda en el tintero un taller más, atípico pero que entiendo debe quedar reflejado en esta relación histórica de lo que ha sido la reparación mecánica en Cabanes. Con una vigencia de apenas 2/4 años, fue instalado por mecánicos foráneos en el barrio de "el Calvari", en local de Pepito el Xisto, a la salida del pueblo en dirección a Oropesa. Estos mecánicos reparaban cuanto se les encargase y de cualquier marca, pero su especialidad era la reparación de motores Diesel. Naturalmente Cabanes no tenía flota suficiente para dar trabajo a un taller de esas características y cerró pocos años después.
Restan otros negocios dedicados a la actividad de reparación y mantenimiento a toda clase de maquinaria, pero ya diversificados en trabajos de herrería, tornos, soldadura, aperos, etc. De todar formas estos negocios ya quedarán reflejados en una entrada específica para talleres de herrería, cerrajería y mantenimiento de maquinaria agrícola.
Con esta aclaración queda completado este breve repaso, sin duda con muchísimas lagunas, de los talleres de reparación de vehículos de nuestra localidad.
Las fechas que se dan son estimativas pero bastante aproximadas (espero) a la realidad, siendo los talleres citados aquellos pioneros que vieron la posibilidad de ganarse la vida facilitando a sus vecinos la reparación de las primeras bicicletas y pasando por el boom de las motocicletas, los motocultores y los primeros SEAT-600, hasta nuestros días.
RAFAEL FABREGAT
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Hola, he encontrado por casualidad tu blog y he de decir que "Vicent el de les bicicletes" es mi abuelo. Lo he encontrado porque estoy haciendo la genealogia de mi familia. Me gustaria que te pusieses en contacto conmigo para ver si tienes mas informacion sobre él o sobre mas miembros de mi familia ya que todos son de Cabanes. Muchas gracias.
ResponderEliminarHola Anita. Lamento informarte que el taller de tu abuelo desapareció hace aproximadamente 60 años. Yo era un niño y apenas llegué a conocerlo. Recuerdo, eso sí, que era un hombre extremadamente alto para la época y también su mujer era mucho más alta que la media. Es en el seno de tu propia familia donde podrán ampliarte cualquier información al respecto. Lo siento. Saludos.
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