Siempre hablamos de los egipcios como una de las civilizaciones más antiguas de la humanidad, al menos entre las adelantadas. Capaces incluso de levantar monumentos tan extraordinarios como las pirámides y diferentes obeliscos de medidas y pesos descomunales. Sin embargo parece ser que hubo otras civilizaciones más antiguas y tan adelantadas como ellos. Al menos eso es lo que parece aunque, por estar debajo del agua, esta afirmación no se deja estudiar con la misma facilidad.
Estas afirmaciones provienen de una isla japonesa llamada Yonaguni, isla perteneciente al archipiélago de Yaeyama. Es la isla habitada más occidental de Japón y situada a 67 millas de la costa este de Taiwan; entre el Mar de China Oriental y el Océano Pacífico. Las primeras noticias escritas sobre esta isla son del año 1477, un relato de pescadores coreanos de la provincia de Jeju. No fue hasta el año 1879 cuando la isla fue incorporada oficialmente al Japón Imperial. Tras la II Guerra Mundial fue ocupada por los Estados Unidos y en 1972 devuelta a Japón como parte de Okinawa. Se la denomina "Isla de las mujeres" aunque hay un 10% de hombres. Siendo utilizados solamente para fines reproductivos, los hombres suelen vivir poco tiempo y niños suelen nacer muy pocos. La isla tiene una superficie de 29 Km2. y una población de 1700 personas.
Las primeras civilizaciones complejas tuvieron lugar en Mesopotamia y Egipto, entre el III y IV milenio a.C. Sin embargo la estructura descubierta bajo las aguas de esta isla japonesa nos dice que, justamente por estar donde está, debió ser construida en época glaciar o sea, unos 8000 años a.C., cuando en los viejos continentes (Europa, Asia y África) el hombre era todavía cazador-recolector. ¿Podría ser ésta la antigua civilización de la que tanto hemos oído hablar?. Para nosotros, la ciudad más antigua del mundo fue Jericó, cuando hace 10.000 años ya tenía una estructura diferenciada e incluso pequeñas murallas, pero nada que ver con las estructuras megalíticas descubiertas bajo las aguas de Yonaguni.
El mundo está actualmente muy ocupado en sobrevivir a la superpoblación y al cambio climático pero, si algún día hay algo más de "tiempo libre" habrá de afrontar esta exploración. Yonaguny tiene pirámides sumergidas que son sin duda alguna muy anteriores a las de Egipto. Para los expertos éste es un capítulo perdido de la Historia de la Humanidad. En 1987 un buceador se sumergió en esas aguas en busca de algo que llevar a casa para la cena. Su sorpresa fue mayúscula al toparse con los restos de una ciudad megalítica y junto a ella una pirámide escalonada de gran tamaño. Lo más sorprendente es que nadie pareció impresionado por el hallazgo y el hecho quedó olvidado hasta 1992, cuando expertos de la Universidad de Ryukyu decidieron estudiar el asunto a fondo.
Tras varios estudios los expertos determinaron que la estructura, de 120 m. de largo por 40 m. de ancho y 27 m. de alto, no es algo natural, sino que está hecho por el hombre. Aunque los estudios realizados quedaron en la universidad japonesa, el hecho trascendió y fueron varios los occidentales que se interesaron por el hallazgo. Tras varias inmersiones se descubrieron otras construcciones que se entienden como un área ceremonial religiosa que se extiende por más de 5 Km. A pesar de la dificultad de datación, se estima que tiene no menos de 10.000 años de antigüedad y anterior por tanto a las pirámides egipcias, ya que sin duda se construiría cuando el nivel del mar era mucho más bajo. Como en tantas cosas de este mundo, la Historia se mezcla con la leyenda y no hay respuestas seguras.
Para los historiadores no deja de ser un hecho curioso que civilizaciones separadas unas de otras por miles de kilómetros y sin conexión alguna entre ellas, pudieran dar lugar a construcciones megalíticas similares. Lo mismo ocurre entre los monumentos egipcios y los colosales templos de Angkor Vat, en Camboya. La historia del hombre es mucho más antigua de lo que suponemos y hay respuestas a las que no podemos llegar. También el preincaico Templo del Sol, en Perú, guarda una asombrosa similitud con la pirámide sumergida de la Isla de Yonaguni. Profesores y geofísicos han estudiado la zona puesto que la parte alta de algunas estructuras de Yonaguni están a tan solo 10 metros de profundidad. Sin embargo, cada cual da su opinión al respecto... Para unos es indudable la mano del hombre, para otros podría ser obra de la Naturaleza.
El misterio sigue en el aire... ¿Usted qué opina?.
RAFAEL FABREGAT
No hay comentarios:
Publicar un comentario