- ¡Qué suerte! -habrán pensado.
Pero lo cierto es que hacía ya mucho tiempo, que la víctima estaba muerta por dentro, acosada sin piedad por una jauría humana que solo ve la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. Pues bien, ya está, por fin os la habéis quitado de encima.
Jueces y verdugos de los demás, pero incapaces de ver vuestras miserias, que las tenéis y muchas. Tiempo al tiempo...
España se ha levantado hoy con la noticia de la muerte de Rita Barberá, alcaldesa de Valencia durante 24 años (1991-2015). Exceptuando el cuatrienio 1991-1995, en todas las siguientes elecciones ganó la alcaldía por mayoría absoluta. En las elecciones de 2015 volvió a ganar a sus opositores por abrumadora mayoría pero, no siendo absoluta, perdió la alcaldía al unirse los partidos de la oposición para proponer otro candidato para ese cargo. Rita Barberá fue también diputada por Valencia en las Cortes Valencianas durante 32 años (1983-2015) y senadora por designación autonómica en 2016 y hasta el día de ayer, en el que sufrió un infarto fulminante en el hotel donde se hospedaba en Madrid. Presa de una cacería injustificada, no ha podido aguantar la presión a la que ha sido sometida últimamente. ¡Vaya atajo de canallas, lamentablemente abundantes en política!.
Rita Barberá cayó fulminada políticamente ante la campaña de acoso y derribo orquestada contra ella por los partidos PODEMOS, COMPROMÍS y PSPV, con el apoyo de CIUDADANOS y en base a:
1º).- Un supuesto blanqueo y/o financiación ilegal de su partido.
2º).- Prevaricación. Adjudicación de contratas municipales a personas de su entorno y afines al partido que representaba, con aceptación de donativos al partido. Al respecto cabe decir que la financiación o supuesto blanqueo no era en beneficio propio, sino en el del partido al que representaba. Los hechos fueron proponer a representantes del PP la trasferencia de 1000 euros que, al parecer, posteriormente se les reintegró en metálico. En cuanto a la prevaricación nadie, ni siquiera Dios, obra a gusto de todos y acusada de prevaricación puede ser cualquier persona que tenga autoridad. Rita Barberá fue acusada principal por su posición jerárquica pero con ella había 49 compañeros más, de los que nadie habla. Ni por el primero ni por el segundo supuesto ha sido condenada judicialmente, pero fue 'ajusticiada' por propios y extraños. Solo hay que ver esta foto y las de abajo.
La cacería ha terminado al morir la presa que se perseguía. Todos sabemos que dirigentes y elementos destacados de estos partidos la acosaban sin piedad, pero no tiene el por qué haber sido esa la causa de su muerte, aunque sin duda lo fue. No solo por parte de sus enemigos políticos, sino también de sus propios compañeros cuyos dirigentes la obligaron, ante el escándalo suscitado, a abandonar el partido y su representación en el Senado por el PP, a cambio de situarla en el Grupo Mixto por la vía de la designación autonómica. Rita Barberá fue una persona muy abierta y querida por los valencianos, pero nadie que esté largo tiempo en el poder escapa de envidias y rivalidades.
Hija de una familia acomodada, después de tan larga trayectoria política ha dejado bienes por valor de 355.000 euros, aunque adeuda 33.000 euros como parte de un préstamo no amortizado en su totalidad. Por no tener, no tenía ni casa propia y vivía en alquiler. La vida es muy injusta. Entre todos la mataron y ella sola se murió... Mucho me temo que los corruptos son otros y que murió una persona respetable, amiga de sus amigos y amante de la tierra que la vio nacer. Descanse en paz.
RAFAEL FABREGAT
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