4 de diciembre de 2025

3291- SOBREVIVIR AL CAMBIO CLIMÁTICO.


Claro que esto ya no es una novedad. En unos días habremos sobrepasado el año 2025 de nuestra Era y lo que hasta el año 2000 era un vaticinio, hoy es una realidad que todos contemplamos. El cambio climático ya está aquí, solo nos queda saber con precisión si somos los culpables de ello o si (ojalá) esto no fuera más que uno de los ciclos normales del planeta y del sistema solar en el que estamos integrados. Lo que todos tenemos más o menos claro es que nadie, viva donde viva, va a escapar de sus consecuencias, si éstas se agravan. Los científicos del clima dicen que, en el presente siglo XXI, las temperaturas van a subir entre los 1,5ºC y los 5,8ºC. Si eso es verdad, que no tenemos el por qué dudarlo, ¿qué va a pasar con los más de 8.000 millones de habitantes del planeta, que (además) no paran de crecer?. Mucho me temo que los que no se ahoguen, morirán de sed...


El mapa que encabeza este escrito pretende mostrarnos el riesgo y las posibilidades que tenemos de escapar a los cambios que se avecinan. Todos tenemos ya claro que el cambio climático es una realidad y que negarla públicamente ya solo haría reir a quien nos lea o escuche. Así pues se trata simplemente de ver, según el mapa indicadoo, cuales son nuestra posibilidades de escapar a las consecuencias de esta realidad innegable. Los sabios del tema, han dibujado el Mapamundi de nuestro planeta y en la parte superior, una barra que de izquierda a derecha, valora mediante diferentes colores el riesgo a sufrir los diferentes daños que sin duda afectarán a todas las partes del mundo, según su ubicación. Está claro que escapar a un lugar de "riesgo cero" será poco menos que imposible, aunque no faltará quien lo intente.


En primer lugar, porque cada cual tiene su vida establecida en cada lugar determinado y en segundo lugar porque ningún punto escapará a las consecuencias de dicho cambio. Aún en el supuesto que el "riesgo cero" existiera en algún punto del planeta, acceder al mismo sería de todo punto imposible. Actualmente ya estamos viviendo una migración insoportable y por un problema simplemente económico, pero cuando ese problema se convierta en una forma de subsistencia, las cosas irán a peor. Sin lugar a dudas, a ese posible aumento de la temperatura, el ser humano se adaptará sin problema alguno. El problema es otro bien diferente y con difícil solución, ya que se trata de solucionar el aclimatamiento de las especies que nos sirven de alimento a una población creciente y descontrolada.


Uno puede acostumbrarse, qué remedio, a ser pobre. Pero nadie puede acostumbrarse a no comer y si el cambio climático va a peor, como se nos vaticina, el mundo puede llegar a ser inhabitable. Y no por la falta de comida, que también, sino porque se luchará mundialmente por el control de la misma. Ojalá sea todo una patraña, como algún gobernante dice creer pero, a las buenas o a las malas, la natalidad tendrá que controlarse. Los habitantes han ido creciendo de forma constante a lo largo del tiempo, pero últimamente y a medida que los medios de aumentar la producción de alimentos ha sido posible, se ha disparado de forma descontrolada. Algo habrá de hacerse. Crecer mucho más será un problema y si a ello hay que añadir los impedimentos del clima, el remedio será más drástico cada día que pase.

Cada día tenemos más claro que los que manejan el dinero y el poder no van a ayudarnos en nada. No van a dejar de fabricar, para evitar el humo destructor del planeta. Podrán instalar algo que mitigue el problema en sus chimeneas, pero sin que su producción y beneficio mermen. Incluso aumentar la producción, si pueden venderla. A ellos nunca va a faltarles de nada. Está demostrado que, aparte de la contaminación industrial, el 75% del CO2 emitido por los seres humanos a la atmósfera, en los últimos veinticinco años, es por la quema de combustibles fósiles y cada día que pasa el parque móvil mundial aumenta en millones de vehículos. ¿Hasta cuando?. ¿Y los aviones o cruceros?. Porque el viajar ya forma parte de las "necesidades" de cualquier persona que se precie. En fin, ¡no tenemos remedio!.

Rafael Fabregat Condill

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