3306- LOS BANCOS DE MAHOMA.

El gran profeta Mahoma prohibió expresamente a sus seguidores "hacer dinero del dinero", es decir: ejercer el oficio de prestamista o banquero. (Capítulo 2, versículo 278 del Corán). Sin embargo los bancos abundan y no poco, en Arabia Saudí y en todos los países islámicos. Teniendo en cuenta lo implantada que está la religión en estos países, ¿Cómo se explica esto?. Pues la explicación está, como no, en uno de los refranes españoles que, al parecer, lo abarca todo. "Hecha la Ley, hecha la trampa". Así lo cuenta el refranero y así ocurre en la práctica. Los banqueros de Alá encontraron la forma de manejar el dinero y multiplicarlo a manos llenas sin romper los mandamientos del Corán. La Ley islámica prohibe expresamente cobrar intereses, pero ese es justamente el beneficio que persiguen banqueros y usureros que, como todos sabemos, son una misma cosa. 

El que vemos en la foto es el Saudí National Bank, quizás el mayor Banco de Arabia Saudí, pero uno más de los que allí existen. Viendo los edificios, se diría que el negocio les va muy bien, a pesar de no poder cobrar intereses. ¿Cómo lo hacen?. Pues muy fácil. Mahoma era todo un profeta, un personaje listo para su tiempo pero que ahora no daría un palo al agua. ¡Y eso que él ya era mercader!. Sería sin duda de aquellos que dicen "comprarás y venderás pero nunca fabricarás". Una máxima que un servidor aprendió, ya muy de mayor, tras llevarse más palos que una estera...

La clave está en reinvertir las ganancias, ya que el Corán sí admite la fluctuación de la rentabilidad, es decir, que uno no puede llevarse las ganancias a su casa pero sí reinvertirlas ¡y aunque esto sirva para ganar más no pasa nada ya que, al haber volatibilidad, quiere decirse que estás haciendo negocio del dinero de tu negocio, no del dinero en sí. Los Banqueros de Mahoma, han estudiado en las mejores universidades del mundo y por mucho dinero que ganen acatan sin duda las instrucciones de Alá. El alma de estos magnates del petróleo y de la política bursatil que el mundo financiero exige en este momento, está a salvo puesto que la pureza del espíritu se mantiene a rajatabla. 

Siguiendo la Ley de Alá, los inversores no cobran intereses, pero en un mundo donde nada es para siempre, también aquí puede que algún día cambien las cosas. Actualmente siete de cada diez universitarios son mujeres. ¿Hasta cuando durará un gobierno enteramente ejercido por hombres?. El 35% de los funcionarios también son mujeres y también el 70% de los depósitos que se efectuan están llevados a cabo por mujeres. Bahrein proporciona cada año 17 millones de barriles de petróleo a Arabia Saudí, uno de los pilares que mantiene saludables a las entidades financieras. Un gran país, con apenas 700.000 habitantes no parece que sea de una solidez ilimitada y, a este paso, las mujeres llegarán a ser un referente a tener en cuenta y no el burro de carga que ha sido hasta ahora.

La religión impide la rentabilidad, que consiguen con la reinversión. Una fortuna basada en la mentira. ¿Se puede engañar a Diós?. Sí, mientras los que dominen la religión estén en connivencia con quienes manejan el poder, pero algún día las mujeres se cansarán de tanto abuso. Mientras la mujer estaba atada a la casa, a los hijos y al cuidado de los ancianos, era fácil cerrarle la boca puesto que no conocía ninguno de sus derechos como persona, pero eso acabará cuando las mujeres estén tan preparadas intelectualmente o más que los hombres. En occidente todos sabemos que la mujer es tan inteligente como el hombre, si no más. Así que los abusos machistas ya están acabando en Europa y no mismo sucederá en los paises islámicos. Alá está cansado de tantos abusos y mentiras.

Rafael Fabregat Condill