2869- CARTA BLANCA.

No. No se trata del famoso juego solitario de cartas. Con este título me refiero yo a la sentencia del Supremo que permite, por fin y según la opinión de alguna gente de izquierdas, que se pueda sacar al dictador Franco del Valle de los Caídos. Carta blanca por tanto. A mí, que quieren que les diga, ni fu ni fa. Yo no soy ni rojo ni azul. He trabajado como un negro toda mi vida y nadie me ha regalado nada.

Hospital Provincial de Castellón.

Estando casi un año dado de alta en autónomos de la Seguridad Social tuvimos nuestra primera hija y hubimos de ingresar en el Hospital Provincial de Castellón, pagando todos los gastos de nuestro bolsillo por no tener cotizados los 12 meses mínimos requeridos para disfrutar de la asistencia gratuita en el Hospital General. Ahora, como todos sabemos, miles de emigrantes y algunos golfos nacionales que le tienen miedo al trabajo y no han cotizado nunca, tienen Tarjeta Sanitaria con cobertura gratuita y hasta las medicinas gratis. ¡Vaya diferencia!. Si hubiera vivido del cuento, como tantos otros, tendría seguramente una opinión interesada pero, por no tener, no tengo ni eso.

Valle de los Caídos. Tumba de Franco.

Así pues, me importa un pito que los restos de ese asesino estén donde están o que los tiren al mar. Cuanto más lejos mejor, pero todo lo anterior no quiere decir que sea partidario del cambio. Serán más de 50.000 euros que tendremos que pagar entre todos. Yo y todo aquel que esté leyendo esta entrada al Blog también. Y me revienta tener que pagar ni un solo céntimo de mi bolsillo para dar satisfacción a quienes han luchado con uñas y dientes para que tal acontecimiento se lleve a cabo. ¿Para qué?. Mejor harían con destinar ese dinero para cosas necesarias, que hay muchas y no se hacen por falta de liquidez. Eso sin contar que esa falta de liquidez viene producida por un sin fin de gastos no necesarios.

MINGORRUBIO. Nuevo Panteón de Franco.

Mi padre también luchó en la Guerra Civil en el bando republicano. No murió pero casi y cuando llegó a su pueblo, al finalizar la contienda y curadas sus heridas, le habían robado todo cuanto tenía. ¿Qué compensación podía pedir por ello?. Sencillamente ninguna. Eran otros tiempos y otras circunstancias. El bando de los perdedores no tenía derecho ni razón para pedir compensación alguna, te hicieran lo que hicieran. Así pues, también podría ser uno de esos que han tocado palmas al enterarse del cambio inminente. Sin embargo, soy de los que piensan que eso no sirve para nada más que para hacer gastos inútiles. Asesinos los hubo en los dos bandos y tan dictador es quien pone, como quien quita.

RAFAEL FABREGAT