2317- EL TAMAÑO IMPORTA, PERO ES RELATIVO.

Ya creo haber dado mi opinión en este aspecto, pero hoy la volveré a repetir. Personalmente la palabra 'infinito' no me cabe en la cabeza. Muchos de los que me siguen creen en Dios pero, al igual que a mi me sucede, no saben decir qué o quien es ese Dios que aseguran que lo controla todo cuando, a la vista está, no parece controlar nada. El mundo está repleto de asesinos y sinvergüenzas que se aprovechan de los demás para triunfar en la vida, arrebatando a los demás honores y haciendas, dineros y prestigio, sin que ninguna justicia se les aplique. Casi al mismo tiempo, gente seria y honrada pierde su honor y su hacienda, incluso la vida en medio de guerras o a manos de auténticos asesinos, sin que ese Dios en el que muchos creen haga nada por impedirlo. 

Miles de niños quedan huérfanos, mueren simplemente de hambre o pierden la vida en los conflictos bélicos, siempre presentes en este mundo plagado de asesinos de élite, muchos de los cuales no aprietan el gatillo pero fabrican esas armas y esa munición para que sean otros quienes mueran o realicen esa mortífera acción. ¿No es igual de asesino quien fabrica las balas que quien las dispara?. Las armas deberían usarse para defenderse, no para atacar, pero entonces fabricarlas no sería negocio pues no hay defensa sin ataque. Convertida la guerra en negocio, ¿qué hace Dios para impedirlo?. ¿Cuantos inocentes, muchos de ellos civiles e incluso niños, mueren para que otros se enriquezcan?. Pues bien, por increíble que os parezca, de lo que quería hablar hoy es del Universo. Un tema que parece escapar de la normalidad.

El mundo que habitamos y todo lo que conocemos, está sometido a un tamaño y a una duración pero, ¿cual es el tamaño del Universo?. Grande, pequeño, infinito... Yo no creo que haya nada infinito aunque los astrónomos, cada día mejor equipados, han llegado a la conclusión de que efectivamente el Universo lo es, por la sencilla razón de que a medida que pueden ver más lejos nuevas galaxias se añaden a las que ya conocían. De la misma manera están viendo con cierta frecuencia como unas estrellas mueren y otras nacen. Si esto es así, que al parecer lo es, el Universo no es distinto de la vida en nuestro propio planeta. No hay muerte, sino transformación. Las cosas cambian constantemente pero no desaparecen, sino que se transforman. La semilla se hace planta, después árbol y después nuevamente semilla. En cuanto al tamaño del Universo...(?)

Ante este orden de cosas, siempre me ha dado por pensar que todo cuanto conocemos tiene un principio y un final y el Universo no tiene por qué ser distinto. En cuanto a su tamaño, visto desde otra perspectiva, el mundo quizás no sea tan grande como a nosotros nos parece. Todo es relativo y la cuestión de los tamaños también puede serlo. Los microbios, las bacterias, también son algo vivo, algo que incluso se defiende cuando lo atacan, modificando su estructura para que esos ataques no acaben con ellos. Si esto es así, que así es, lo de nuestro tamaño también es algo relativo y lo mismo puede suceder con el cosmos que nos rodea. ¿Quien nos dice que todo lo que somos y lo que nos rodea, no sea más que un simple juego para quien lo maneja todo?. A los seres humanos nos ha dado por llamarle Dios, pero igual podrÍamos llamarlo de otro modo. 

La cuestión es que este mundo, que a nosotros nos parece tan grande, bien podría suceder que fuera una probeta gigante en la que 'alguien' está experimentando con nosotros. 
Ese 'alguien' al que los hombres llaman Dios, puede ser cualquier cosa millones de veces más grande que nosotros. El pequeño pulgón que chupa la salvia de nuestros frutales, también disfruta del sol y de la vida, comiendo y apareándose mientras tú no vayas con el atomizador lleno de insecticida para cargártelo. Yo no creo que ese pulgón sea consciente de su insignificancia, ni creo tampoco que el ser humano sea tan superior como se cree, de la misma manera que una simple planta tenga menos derechos que un animal a la vida. Cuando cortas un árbol, has cortado una vida importante. La única diferencia es que el árbol no se queja... pero porque no puede.

RAFAEL FABREGAT