Triste "Día de la Comunidad Valenciana" en este año 2017, tomadas las calles por el separatismo catalán si Ximo Puig no lo remedia, que sin duda será que no. Aunque ya hace años que va la cosa, este año más que nunca queda patente el hecho de que el independentismo catalán, cual Judas Iscariote, compra con 40 denarios de plata las voluntades de Acció Cultural, una hermandad que, al fin y al cabo, lucha por idénticas metas desde todos los frentes y muy especialmente desde la Consejería de Educación.
Para los teleñecos de la CUP (Puigdemont y Junqueras) debió ser una fuerte bofetada cuando el Tribunal Constitucional les prohibió reunirse tal día como hoy para hacer pública su declaración unilateral de independencia, pero pronto recapacitaron. En Valencia tenían fuertes aliados para la defensa de sus trincheras. Hay que reconocer que ideas no les faltan. A cada zancadilla que les ponen, nueva cosa que se les ocurre. El día 9 de Octubre 2017 no sería el pleno del Consell de Govern, pero sí el de la Comunidad Valenciana, uno más de los países catalanes que habían de colaborar en la quiebra de España a todos los niveles. Nos preguntamos muchos que les habremos hecho los españoles para que nos odien de esta manera. En fin, ya veremos que se les ocurre ante la huida de empresas y capitales, porque lo de "todo por la pela" para esta gente es dogma de fe.
De momento el programa de esta gente es invadir las calles valencianas de banderas independentistas. Solo falta saber de qué bando estará la máxima autoridad valenciana (PSOE) ya que a los de Acció Cultural y Compromís hace ya mucho tiempo que les hemos visto el plumero. También los de Unidos Podemos han dejado su tarjeta de visita, aunque últimamente, a la vista de los acontecimientos, parecen dudar de lo que es conveniente o no para su partido. No sea que en próximas elecciones queden a la altura del betún. Sin duda, el lema de este año tampoco tendrá desperdicio. Algunos tachan de ingerencia la presencia de los golpistas catalanes en la fiesta de la Comunidad Valenciana, pero a ellos les importa poco la opinión de los auténticos valencianos. Lo de "todo por la pela" ya se les ha quedado corto y van a "todo por el poder".
De izquierdas o de derechas, a los valencianos no nos gustan las injerencias catalanistas y menos todavía la presencia de separatistas radicales que solo buscan su propio beneficio. Queremos vivir en paz, de nuestro trabajo y no del sudor de los demás. Creemos, porque así lo aprendimos de nuestros mayores, que Cataluña es España, como también lo es el País Vasco y por supuesto Valencia y Mallorca. Jamás hubo unos "Paises Catalanes" como ellos pregonan y menos aún un Reino Catalán. En cambio sí hubo un Reino de Mallorca y un Reino de Valencia, ésta última con su "Senyera" otorgada con rango de realeza por el rey Pedro IV de Aragón, que desciende de forma totalmente vertical desde el balcón del Ayuntamiento, sin inclinarse ante nadie. La de Valencia es la única bandera del mundo con categoría real, prerrogativa concedida por el rey aragonés como reconocimiento a los valencianos por su oposición ante Pedro I de Castilla.
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