2925- TIEMPO DE REBAJAS.

Que nadie se engañe. Las rebajas siempre tienen un doble objetivo. Normalmente, hacer caja y eliminar todos los impedimentos que un lastre (stock) innecesario ocasiona. No lo hacen por hacernos un favor, ni mucho menos, sino por su propio interés. Yo fui industrial y distribuidor pero, sin embargo, nunca fui partidario de ofrecer saldos. Me pareció vergonzoso, una auténtica estafa, ofertar a cuatro lo que el día anterior valía seis. Quiere decirse que los días anteriores a las rebajas, ya podías ofrecer esos precios y por lo tanto estabas abusando de la confianza que tus clientes habían depositado en ti y en tu empresa... Vamos, ¡para comprar durante las rebajas y no volver jamás!.

Pues bien, algo semejante está haciendo el "Sanchismo" (a eso no se le puede llamar PSOE y menos aún socialismo) estos días de vergüenza ciudadana y muy especialmente entre sus votantes, los que sienten de verdad el auténtico socialismo... En primer lugar lo de la "separación de poderes" es una trola que ya jamás va a creérsela nadie. Tal como el Presidente en funciones aseguraba pocas semanas atrás, era cierto que el Gobierno es quien pone y quita a los muñecos de trapo que forman la justicia española y por lo tanto estos hacen y deshacen a voluntad de quien les ha sentado en dichos sillones. Si esto es así, que ya nadie duda que lo sea, quiere decirse que, al igual que ocurre con la "Rebajas de Enero", la Justicia se vende cara o barata según los personajes o circunstancias de quien se haya de juzgar y/o condenar.

Junqueras está en la cárcel porque "compró" fuera de tiempo. Se equivocó al comprar fuera de la época de Rebajas. Aún así, por ser quien es y porque en este momento pesa lo que pesa, se le aplicará el descuento pertinente y se emitirá el correspondiente Abono a fin de que el precio real a pagar sea el de "tiempo de rebajas", fuera cuando fuese la fecha de compra. Se ve que ha perdido el ticket de compra y la Abogacía del Estado, órgano al servicio del Gobierno aunque éste sea "en funciones", va a ponerle en la calle pues no es quien para ejercer justicia ni derechos, sino para estar al servicio de quien paga y en este momento quien paga es "el Sanchismo" y éste lucha con uñas y dientes para que "la Justicia" (que risa) dé su brazo a torcer y saque de la cárcel a Junqueras.

Solo así el Presidente "en funciones" pasara a ser Presidente del Gobierno de España, pero no de (todos) los españoles ni tampoco de la mitad más uno, como es preceptivo. Así funcionan las cosas en España, como semi-república latina y bananera. Este país peninsular, al sur de los Pirineos, siempre se dijo que era "diferente". Nunca fue de Europa ni lo sería jamás ya que es justamente esa cordillera, que separa el Cantábrico del Mediterráneo, la que también separa Europa de los despojos norteafricanos a los que, parece ser que políticamente pertenecemos. Palabras duras, está claro, pero reales como la vida misma. Una cosa es la geografía y otra es la política. Las autoridades europeas siempre nos han mirado por encima del hombro y con razón. No somos como ellos ni lo seremos nunca. Según su forma de vernos, también en la política hay clases...

Toda piedra hace pared pero, lamentablemente, España es el "ripio", es decir: esa piedra pequeña que sirve para que las grandes encajen unas con otras, nada más. Uno no tiene más remedio que aceptar el rol que nos viene dado, especialmente porque no somos capaces de mejorarlo.

Y si no te gustan los diputados, coge a los senadores. Tanto monta, monta tanto. ¡Por lo menos, a los Diputamos los vota el pueblo...! Gracias a nuestro democrático voto, en este año del Señor de 2019 el Congreso de Diputados está formado por 16 partidos políticos diferentes. Éramos pocos y parió la abuela... Gracias a nuestra capacidad reproductora cualquier "Perico, el de los palotes", con un solo escaño, tiene capacidad para decidir lo que se hace o deshace en España sin que otros, con cien escaños o más, puedan hacer nada para impedirlo. A menos que le sobornen, claro. Nadie nos avisó en 1978 de que tal eventualidad fuera posible en España, si votábamos SI a la Democracia... Sino, de que.

RAFAEL FABREGAT