2380- EL SEXO INTERNAUTA.

Las cosas pintan mal... Un estudio sobre las relaciones sexuales dentro del matrimonio nos cuenta que "para hacer bien el amor no hay que casarse". 
Siempre se ha dicho que antiguamente la gente se casaba para hacer el amor, más y mejor. Al menos para hacerlo "con derecho a ello", tranquilamente, en casa y sin peligro de que nadie te pillara en pelota picada en un descampado o dentro del coche. 
¡Ala, dale que te pego, hasta que 'alguien' caiga extenuado!. Ese alguien siempre era el chico, claro... ¡como antes se pasaba tanta hambre...! 
Pero los tiempos cambian y ahora, para hacer el amor más y mejor, hay que quedarse soltero, o eso es lo que dicen las encuestas. Sí amigos, todo se ha vuelto del revés y follan más y mejor los solteros que los casados, o eso es lo que nos cuentan los expertos. 

Naturalmente estamos hablando de personas sanas de entre 20 y 50 años, una edad para 'comerte el mundo' un día sí y otro también. Los que peor se lo pasan son los japoneses casados, cuya mayoría de matrimonios encuestados dijo no haber practicado sexo en el último mes y sin esperanzas de que eso cambie en el futuro. ¿El motivo?. Pues casi un 40% de los hombres dice llegar cansados a casa, mientras que las mujeres alegan que el sexo les resultaba problemático... ¿Problemático?. En fin ellos sabrán, pero la cuestión es que no mojan... Y no lo hacen porque, al parecer, no ponen interés en el asunto.

Los norteamericanos también están 'de capa caída'. En los últimos quince años han bajado de las 73 relaciones sexuales al año a las 55 que tienen actualmente de media. Sin embargo, y ahí está la cuestión, los solteros tuvieron 59 relaciones sexuales al año. ¿Para qué casarse pues?. No lo vais a creer pero, ahondando en ello, resulta que el motivo es porque los casados, aunque solo sea en el subconsciente, se llevan a casa el trabajo o los problemas derivados del mismo, cosa que los solteros no suelen hacer. Muchos casados incluso se llevan el móvil a la cama y el sexo queda aparcado un día sí y otro también para mejor ocasión, mientras que los solteros se llevan a la cama lo mejorcito que encuentran y... ¡sin móvil!.

RAFAEL FABREGAT