2 de junio de 2017

2426- SEXO Y CONDUCCIÓN.

Naturalmente se constata su gran peligrosidad, siempre que se practique sin detener el vehículo en lugar adecuado y apartado de la vía. Son muchos los casos de salida de vía e incluso choques con muros y vehículos que van en sentido contrario. Se constata que la mayor parte de los casos son conduciendo el varón y practicándole su pareja sexo oral.

La Dirección General de Tráfico estudia implantar en estos casos una multa especial por conducción temeraria, derivada de actividad sexual mientras se conduce. Como es natural ni quien practica, ni a quien se le practica, le viene en mente que tal gratificante maniobra pueda tener peligro alguno a propios ni extraños pero, en muchos casos y durante el clímax final, el "sufrido" conductor queda expuesto durante unos breves instantes a creer que está en el paraíso terrenal y no en el infierno de la carretera. Es en esos breves instantes cuando más de uno se la pega contra lo primero que pilla delante. Unas veces es un árbol o un quitamiedos (guardarrail) de hormigón, pero otras puede ser un inocente viandante con muchos problemas y pocas alegrías...

Total, que se está estudiando una multa gorda por actividad inapropiada durante la conducción. A mí me parece bien porque estoy cerca de los 70 años y tengo más probabilidades de ser sufrido peatón que alegre conductor... La Ley de Tráfico sobre Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial no contemplaba hasta ahora multas especiales por este tipo de actos, pero los tiempos cambian y lo que antes era inusual y esporádico, parece ser que en la actualidad es frecuente y un peligro claro para el tráfico rodado. Las aseguradoras tienen comprobado que el 78% de los accidentes en carretera se deben a distracciones al volante, aunque no quieren especificar qué porcentaje debido a "distracciones sexuales". ¡Mejor que quede en el anonimato...!

RAFAEL FABREGAT

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