10 de noviembre de 2018

2687- ACEITE, PAN Y PATATAS..

Hasta no muchas décadas atrás, España y Portugal siempre fueron vistos desde Europa como países tercermundistas. De hecho siempre se decía: "Europa comienza en los Pirineos". Ignoraban los europeos, o pretendían ignorar, que con este comentario desdeñaban a dos países de grandes navegantes y descubridores, gracias a los cuales pudieron llevar a sus mesas muchas viandas de las que presumen como propias, cuando en realidad no las conocieron hasta que viajeros españoles y portugueses las trajeran al viejo continente. Cacao, Patata, Tomate, Maíz, Vainilla, etc., etc. Ya en pleno siglo XXI los europeos parecen más calmados pues necesitan nuestra colaboración en la defensa de sus intereses, comerciales y de toda índole. Pero, en su prepotencia, todavía nos miran por encima del hombro.

Claro que hoy quiero hablar, entre otras cosas, del cerdo. Ese bendito animal que tanta hambre ha evitado en las cocinas de los pobres, que no podían permitirse la compra de otros animales como el cordero o la ternera. Cuando, de pequeños, nuestras madres nos mandaban a la carnicería a comprar un simple cuarto de kilo (250 gr.) de chuletas de cordero, la pregunta de la carnicera de turno era inevitable y sin retintín: ¿Quien se ha puesto enfermo?. Y es que, claro, los pobres, que éramos todos, a la carnicería comprábamos tocino, embutido y muy de tarde en tarde magro de cerdo, pero nunca de lo demás. El cerdo y sus derivados era lo que más se vendía en las carnicerías de todos los pueblos de España. Entre otras razones porque los animales de corral (conejos, gallinas, etc.) se criaban en las casas. 

Pues bien. Actualmente los llamados "animalistas" ya no solo se manifiestan frente a las corridas de los toros bravos, ante cuya brutalidad podríamos aplaudir muchos su defensa, sino que ya lo hacen también frente a los establecimientos del popular "Jamón Ibérico de Bellota" del que podemos presumir y presumimos en España por ser una auténtico manjar a nivel internacional. Estos elementos, que al parecer son en su mayoría vegetarianos e "hijos de papá", ya no tienen otra cosa mejor que hacer que intentar engañar a los bienpensantes proclamándose defensores de todos los animales, ignorando o queriendo ignorar que las frutas y hortalizas, incluso las drogas que muchos devoran con ansiedad, también son seres vivos que se arrancan de su hábitat natural. 

Claro que eso no es nada, comparado con la defensa de la libertad de la mujer con respecto al aborto. ¿Cómo pueden defender la vida de un animal, que ha sido criado única y exclusivamente para la alimentación humana, y al mismo tiempo apoyar los más de 100.000 abortos que se llevan a cabo anualmente ¡solo en España!. ¿Cómo se come eso?. ¡Toros y cerdos al poder y niños a las cloacas!. ¿En qué cabeza cabe tal atrocidad?. Progres sí, pero según para qué cosas. La mayoría, gandules que viven del sudor de los demás. Si su conciencia les permite acabar con la vida de los niños nonatos, cualquier cosa es posible. Cualquiera menos autodenominarse defensores de la vida. ¿Porqué no defienden la vida de los niños no nacidos y sí la de los cerdos?. 

Vaya cara dura la suya. ¿Por qué no increpan a las carnicerías halal, que venden cordero, ternera, etc.?. Saben que allí peligrarían las orejas. Las suyas, claro está. Señalando un jamón ibérico de pata negra, valorado Dios sabe por cuanto dinero, se atreven a decir que eso no es un jamón, sino un cerdo muerto. Pues claro que sí, cretinos, pero bien que os lo coméis si os invitan. Y un boletus edulis o unos níscalos a la brasa... ¿No eran seres vivos antes de arrancarlos del monte?. Hay cosas señores, que no se comprenden y lo que esa gentuza propugna es una de ellas. Yo tampoco puedo entender que, en pleno siglo XXI, se le llame espectáculo a hacer sufrir a un toro para finalmente matarlo, pero de ahí a llamar asesinos a quienes crían animales para el sustento diario de las personas... hay un mundo que solo los locos no saben distinguir. 

Ahora son los toros y el jamón, pero algo más vendrá después. Algo habrá que comer, digo yo. 
Siempre hablando de España, en todas las comunidades que siglos atrás fueron aragonesas, se ha cazado siempre a los zorzales (tordos) en la modalidad llamada "parany" que consiste en poner varitas de esparto impregnadas de un adhesivo. Pues bien, no han parado hasta conseguir ilegalizar esta caza, al tiempo que aplauden a rabiar que esos mismos animalitos sean masacrados a tiros de escopeta, hasta no dejar ni uno. 
Y la caza mayor, que se lleva a cabo con rifles de precisión dotados de mira telescópica, que disparan balas a cientos de metros del animal... ¿Es algo más racional?. 
¿Donde está la defensa de la vida que propugna esta gentuza?. 
¿Por qué no piden la erradicación de la caza en todas sus modalidades?. Por mi... ¡Personalmente me gusta más el pescado que la carne y en mi casa tengo aceite, pan y patatas!.

RAFAEL FABREGAT

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