Yo no sé lo que pasa en otros pueblos, pero en el nuestro, delante o detrás todos hablamos. Más para mal que para bien y casi siempre sin saber el fondo de las cosas. El caso es que cuando lo sabemos, también hablamos. Unas veces para intentar una mejora y otras para fastidiar, que no es poco.
En cabanes, como en Madrid, no todos vivimos en la Puerta del Sol. El 99% tenemos nuestra casa un poco, o un mucho, más allá de la M-40 o incluso de la M-50. ¿Qué le vamos a hacer?. Cuando mi mujer y yo nos casamos Cabanes no tenía polígonos industriales y para desempeñar su oficio, cada cual se las apañaba como podía.
Servicios y detallistas precisaban un lugar céntrico, aunque fuera pequeño, pero otros de tipo industrial lo necesitábamos grande, sin importar que estuviera extramuros.
El problema, que no fue tal, es que mi mujer y yo siempre quisimos tener la vivienda adjunta al negocio y habiendo de ser grande tenía que estar apartado del centro.
Lo encontramos en el carrer de Castelló. Se trataba de una de las mejores calles de la localidad, pero al final de la misma.
La "era de les Camiles" era un espacio de más de 300 m2. ubicado en el nº 108 que entre unas cosas y otras se quedó en unos 200 m2. pero con el que nos apañamos laboralmente y en el que instalamos nuestra vivienda en los pisos superiores.
El negocio un poco ajustado, pero la vivienda demasiado grande, aunque entonces lo llenamos todo. Éramos mucha gente y todo el espacio era poco, pero las cosas cambian.
Con el tiempo se marchan los viejos y los jóvenes, y al final todo sobra.
Más tarde, con los años, llegaron los polígonos industriales a Cabanes y el negocio se trasladó al nº 18 de la Avda. de España, en el pol. ind. Pont pero los años, repito, van pasando y en la actualidad ya es una de nuestra hijas quien ha cogido el relevo. Lógicamente ya no hay actividad industrial y en este momento solamente se dedica a la distribución al por mayor.
Las cosas cambian y especialmente en España ya no es rentable fabricar. Los españoles hemos dejado de ser productores para dedicarnos a comercializar lo que otros fabrican. Es la imparable evolución del mundo.
Sin embargo el motivo principal de esta entrada era señalar, según el diario El Mundo-Castellón, el escaso gasto lumínico que hacen los Ayuntamientos de la provicia en Navidad. A este efecto y según la foto adjunta, mostraba lo que el vecino pueblo de Coves de Vinromá tenía puesto el pasado año 2021. A la gente de Cabanes no nos parece tan pobre ya que, con el adorno de la foto, en nuestro pueblo hacen tres trozos y adornan toda una calle (carrer de Castelló) y de las principales, por ser la única que lleva al viajero al centro de la población. Una calle que llega al nº 120 y cuyo último adorno está situado en la casa nº 54, ya que el gran abeto que recibe al visitante en el nº 100, no está adornado todavía en el momento de escribir esta entrada al blog. No pasa nada. Si el Ayuntamiento no tiene dinero para mas... ¡Lo más importante es el centro!. Cuando había alguacil-pregonero, tampoco iba más allá del nº 50 de dicha calle. Los importantes ya estaban avisados...
RAFAEL FABREGAT
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