15 de agosto de 2011

0455- LA MAR DE HISTORIAS DEL CARIBE.

El Mar Caribe, adyacente al Océano Atlántico, lo delimitan al norte las Antillas Mayores (Puerto Rico, Jamaica, Cuba y República Dominicana), al sur Venezuela, Panamá y Colombia, al este las Antillas Menores y al oeste Costa Rica, Guatemala, Nicaragua, Honduras y Belice. El Mar Caribe tiene una profundidad media de 2.200 metros, siendo la Fosa de Caimán el punto más profundo con 7.500 metros por debajo del nivel del mar. Al conjunto de la zona, incluyendo las islas que lo componen, se le denomina Gran Caribe. Sus aguas bañan 35 estados o territorios diferentes. En sus aguas tropicales la temperatura media del agua son 27º con una variación máxima (+/-) de 3 grados. Un verdadero paraíso. 

El mayor inconveniente de la zona son las frecuentes tormentas tropicales y huracanes que asolan la región y causan numerosos daños entre la población. De todas formas el continuo aumento del bienestar entre sus gentes, hace que vayan mejorándose las condiciones de vida y muy especialmente las casas, cada día más resistentes a estos temporales. Con 2.515.900 Km2. el Mar Caribe es el segundo más grande del mundo pero, exceptuando quizás el Mediterráneo, también puede que sea el que más historia pueda contener. Uno de los más tranquilos del mundo hasta finales del siglo XV, apenas navegado por los indios de las diferentes islas que lo salpican, eldescubrimiento a cargo de Cristóbal Colón y posteriores países que rápidamente se desplazaron para sacar tajada del pastel que los españoles habían localizado al otro extremo del océano Atlántico, lo convirtieron rápidamente en un continuo trasiego de barcos. 

De mayor calado cada día, con el que transportar todo tipo de aparejos y mano de obra para arrancar de las entrañas de aquel territorio, la mayor cantidad de riquezas posible. Mulas, arados, hachas, sierras, azadas y miles de colonos marcharon a "las indias" en busca de una mejora de sus vidas y de su nulo patrimonio.Primero fueron los exploradores, después los conquistadores, tras ellos los colonos y finalmente los esclavos. Cuando todos los anteriores se hubieron asentado en los nuevos territorios y empezaron a llegar los primeros frutos, llegaron los que siempre llegan en último lugar. ¿Para qué madrugar, si eso solo trae problemas y dolor de espalda?. Hicieron acto de presencia los "listos de turno", una raza de indeseables que pueblan y poblarán siempre el planeta, desde los inicios de la humanidad. 

El buitre es un ave antigua, despiadada y necesaria para limpiar la tierra de inmundicias. Animales débiles, enfermizos y cadáveres son consumidos por estas aves que impiden la contaminación del medio ambiente. De la misma forma, el buitre humano limpia la cosecha y la cartera de sus congéneres, contribuyendo a que el resto de mortales vaya espabilando un poquito más cada día. Aún así, los tontos no se acaban nunca pero, en fin, los buitres hacen lo que pueden. Pobrecitos... En fin, a lo que íbamos... Sin embargo todo en la vida tiene un precio y también el bienestar que trae el turismo con sus divisas, tiene su contrapartida. Hasta hace bien poco, justamente por su escasa entidad, los diferentes hoteles de la zona vertían sus aguas negras al mar sin que se apreciara contaminación alguna.

Claro que el turismo ha ido a más y actualmente, por su masificación, se hace obligado el tratamiento de estos vertidos antes de que lleguen a ese mar que les trae los beneficios del turismo. Aún así las medidas actualmente en funcionamiento no son tampoco las más óptimas. Instalado mayormente el sistema de decantación, los rebosaderos van igualmente al mar cargados ahora de toda clase de elementos químicos que si no son insalubres para los humanos si que son altamente contaminantes para los fondos marinos de las proximidades, asunto importante para el turismo de buceo. Es difícil, cuando no imposible, tenerlo todo en este mundo. Antiguamente y tras el descubrimiento de Colón, a este mar se le denominaba Mar de las Antillas, con amplitud de habla hispana en la casi totalidad de las islas que lo componen. Los caribeños precolombinos que las habitaban, denominados los Taínos, ya eran expertos agricultores, pescadores y alfareros por lo que hubieran podido prescindir perfectamente de nuestra odiosa visita... 

El área fue rápidamente colonizada y una importante ruta marítima se encargó de transportar todo aquello que las islas necesitaban y producían. Ante todo ese trajín de riquezas en ambas direcciones, no tardaron en aparecer los amigos de lo ajeno.
Gran cantidad de piratas y corsarios hicieron su aparición y ello obligó a la construcción de importantes defensas navales, así como fortalezas en puntos estratégicos que defendieran las riquezas que tanto costaban de extraer de aquellas agradecidas tierras. En aquellas confrontaciones, cientos de barcos cargados de todo tipo de bienes se fueron al abismo. Los piratas, conocedores de la zona y dirigidos por expertos marineros, carecían de piedad y nada era suficiente para calmar sus ansias de poder y riquezas. 

Pero eso pasó a la historia y tampoco es tema a profundizar en el día de hoy.
El Mar Caribe es navegado actual y diariamente por cientos de cruceros que, por su lujo y confort, hacen las delicias de los turistas que desean recorrerlo y disfrutarlo con la máxima intensidad. Ya no se trata de expoliar a nadie, sino de poder disfrutar de los privilegios de una zona con el máximo atractivo natural y de hacerlo con el respeto que la naturaleza y sus habitantes merecen. Vaya desde este blog, un fuerte abrazo a todos los hispano-parlantes del Caribe y a todas las personas de buena voluntad que entienden este gran idioma, que llegó a ser el más importante del mundo. ¡Hasta siempre...!

RAFAEL FABREGAT

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