El Estado de Washington rinde homenaje, con esta denominación, al primer presidente norteamericano y vencedor de la Guerra de la Independencia de los Estados Unidos de América en 1.776. El territorio -nada que ver con la capital norteamericana situada en el Distrito de Columbia- está ubicado al noroeste de los Estados Unidos y limita al norte con Canadá, al sur con Oregón, al este con Idaho y al oeste con el océano Pacífico. Ocupa un total de 184.666 Km2. y tiene alrededor de 6,5 millones de habitantes de los cuales en Olympia, su capital, solo viven unas 43.000 personas. La ciudad más importante del Estado es Seattle, con una población oficial de 675.000 habitantes pero que en su área metropolitana ubica a casi 3,5 millones de almas.
El Estado da cabida a la mayor presa de los EEUU (Presa Grand Coulee) y también a la sede del mayor fabricante de aviones (Boing) del mundo y a varias de sus fábricas. Su principal economía se centra en el turismo y en la industria aeroespacial aunque su inmensa riqueza forestal, plagada de grandiosos bosques de coníferas, le ha valido el nombre de Evergreen State y le hacen líder de la industria maderera estadounidense.
De acuerdo con el Tratado de Tordesillas, en la década de 1.750, las diferentes tribus de Salishianos y Penutianos que habitaban la región desde tiempo inmemorial, fueron sorprendidos por la llegada de los españoles que, aunque exploraron todo el territorio, no fundaron ningún asentamiento permanente. Solo el miedo a una posible expansión rusa, fue el motivo de su presencia en la zona, a fin de reivindicarla para la Corona española.
El primer europeo que cartografió el litoral del Estado de Washington fue el español Juan Francisco de la Bodega y Cuadra, que lo hizo en 1.775. Conforme al Tratado que dirimió los incidentes de la isla de Nutka, los españoles abandonaron la región en 1.795 que quedaría bajo dominio británico. Sin embargo el territorio seguiría estando disputado, esta vez entre estadounidenses y británicos durante más de cuarenta años hasta que finalmente, en la década de 1.840 los Estados Unidos reivindicaron formalmente todas las tierras situadas al sur del meridiano 54º 40', al oeste de las Montañas Rocosas. Tras numerosas disputas y según el Tratado de Oregón de 1.846 el conflicto dio lugar al establecimiento de fronteras a lo largo del paralelo 49º por el cual todos estos territorios, a excepción de la isla de Vancouber, quedarían en poder estadounidense. Finalmente, el 11 de Noviembre de 1.889 y con el nombre de Washington, este territorio se convertiría en el Estado número 42 de los Estados Unidos de América.
A finales del siglo XIX y principios del XX, aunque vaqueros e importantes madereros habían sustituido a los descontrolados bosques y al indomable desierto, la región seguía teniendo la consideración de salvaje y muy peligrosa. La prosperidad había llegado rápidamente a la zona y ésta trajo consigo que muchas de sus ciudades fueran centro de juego y prostitución. Gran productor de madera y todo tipo de alimentos, el Estado de Washington se vio altamente favorecido con la llegada de la I Guerra Mundial. También la ciudad de Seattle se convirtió en una de las principales productoras de aviones y barcos de guerra, fundándose entonces la Boing, primera fabricante mundial de aviones. Sin embargo el Crac del 29 arruinó completamente la economía del estado, aunque se recuperó rápidamente con la llegada de la II Guerra Mundial.
En Mayo de 1.980 entra en erupción el Monte Saint Helens, que cubre de cenizas una zona de más de 1.500 Km2. Mueren varias decenas de personas y provoca daños superiores a los 4.000 millones de dólares. Varias ciudades fueron cubiertas por una espesa capa de cenizas.
A día de hoy, ya en el siglo XXI, el estado de Washington es una región próspera y fuertemente industrializada. La agricultura, la ganadería y la industria maderera han perdido mucha de su fuerza anterior y es su industria altamente especializada la que sitúa a sus habitantes a la cabeza de la economía estadounidense con un PIB per cápita superior a los 48.000$USA. En el sector primario solo trabaja un 2% de la población y un 16% en el secundario, siendo el terciario quien ocupa un 82% de toda la mano de obra, que solo tiene una tasa de paro del 6%. Casi el 80% de la electricidad que consume el Estado proviene de centrales hidroeléctricas, siendo la mayor tasa de energía renovable del país.
El centro económico del estado es Seattle, principal puerto de la costa oeste de los Estados Unidos y en el que se ubica la principal compañía de ferrys del mundo. Gracias a su localización estratégica, es también importante centro aeroportuario. Su proximidad con Alaska, Hawai y Asia, hacen de este aeropuerto uno de los más transitados. Con casi 6.000 Km. de vías y 20 compañías ferroviarias, el estado de Washington da también uno de los más completos servicios de ferrocarril para pasajeros y mercancías, sin desmerecer las importantes autopistas interestatales que comunican toda la región con el resto de los Estados Unidos.
Su población es blanca en un 79%, seguida de un 8% de latinoamericanos, un 6% de asiáticos, un 3% de afroamericanos y un 4% entre nativos americanos y otras razas. En la política, como es natural, son mayoritarios los demócratas en las grandes ciudades y republicanos en el medio rural.
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