25 de octubre de 2015

1921- STOP. PARADA OBLIGATORIA.

Pues sí amigos. Mi mujer me ha dicho que no lleve a casa ni una sola seta más y yo, quizás un calzonazos, me apresto a obedecerle. Los que me conocen podrán pensar que es cierto o imposible (lo de ser un calzonazos, digo), pues cada cual tendrá su opinión al respecto, pero es lo que hay. Que cada cual piense lo que quiera, pero lo cierto y seguro es que en lo que resta de temporada no creo que vuelva a buscar ninguna seta más. Naturalmente todo en la vida tiene una explicación y esto también. Como ya he contado en entradas anteriores la Campaña micológica 2015 ha sido (no para mí) bastante desigual. Yo no soy ningún experto en la materia, sino un simple aficionado y con un campo de acción limitado al Maestrazgo turol-castellonense. 


Quizás algún lector me tache de engreído pero, tal como dice mi mujer, no me hacen falta más y el contenido de esta entrada es justamente por esa cuestión. La temporada (mi temporada) de setas otoñales empezó a finales de Agosto... Unas lluvias inesperadas hicieron eclosionar los primeros Boletus y robellones. Pero aquello solo era el comienzo de una temporada que prometía y mucho. Otro chaparrón, la guinda del pastel, se añadió a primeros de Septiembre. Los robellones salían por doquier. Sin madrugar y sin esfuerzo alguno, llenábamos las cestas todos los fines de semana. Como pueden imaginar todos los que son aficionados a las setas, aquello era una fiesta que invitaba a repartir platos y más platos entre amigos y familiares.


Pero en el Maestrazgo las lluvias cesaron y para muchos la segunda quincena de Septiembre ya no fue igual. Tras unos días de viento de poniente el monte se secó y las setas dejaron de salir. La verdad es que no podemos quejarnos, pues subimos todos los sábados del mes sin excepción y con resultado notable, a pesar de la sequía. El caso es que los vientos que frenaron la salida de setas en Teruel, también lo hicieron en la provincia de Castellón a pesar de las tres semanas de diferencia entre la eclosión de un lugar y otro. El caso es que tampoco en los montes de Castellón han salido robellones este año y los aficionados que solo buscan por estos lares se han quedado sin el sabroso manjar. Apenas cuatro ejemplares mal contados.


Con mi arcón-congelador al 70%, solamente con Boletus, Robellones y Llanegas, estaba yo un poco decaído pensando que no merecía la pena ir a pasear campos y montes, cuando una amiga de mi mujer le dio recado para mí de que las setas de cardo habían empezado a salir. Dando un salto en la silla me armé de cesta y cuchillo. Demasiado sabía yo donde tenía que ir a buscarlas. Efectivamente, por lo que se ve, las setas de cardo apenas se han visto afectadas por el poniente de mediados de Septiembre. Además, el mes de Octubre se ha visto regado dos o tres veces. En poca cantidad, pero suficiente para sazonar los campos. El resultado, ya lo podéis imaginar. Llevo tres sábados recogiendo un cesta y una caja frutera, cada mañana. El arcón-congelador a tope. La mujer quiere pegarme. ¡Socorro...!
El que quiera aprender, que haga clic aquí: https://www.youtube.com/watch?v=-A4o6pN2gWM

RAFAEL FABREGAT

2 comentarios:

  1. Buenas tardes, ha pensado en dar cursos de recolectar setas en el monte, seria una manera de seguir disfrutando, un saludo.

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  2. Por favor Ascen... ¿Quien soy yo para dar cursos de recolección?. No mujer no. Yo soy un simple aficionado que busca setas desde hace 50 años, que se dice pronto, eso sí. Pero nada más. De todas formas, en lo que pueda ayudar aquí estoy para lo que sea. Un abrazo.

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