En Villanueva de los Infantes, pedanía de la localidad de Celanova y provincia de Orense (España) dos infantes custodian a la imagen mariana más pequeña del mundo. Imagen de la que se desconoce su origen y la técnica con la que fue realizada, puesto que en realidad se trata de un huevo de cristal con la Virgen en su interior, cual si se tratara de una santa reliquia y que ha sido minuciosamente estudiada sin que se hayan descubierto soldaduras que muestren la manera con la que fue sellada. La imagen tiene fama de milagrera y por consiguiente es altamente venerada por los vecinos del lugar y pueblos próximos que acuden a su procesión anual de forma multitudinaria.
El año 1650, un pastor encontró una bola de cristal de forma elíptica, en cuyo interior había una imagen de la Virgen María. Curioso la tomó entre sus manos examinándola, pero pronto hubo de soltarla puesto que a cada segundo que pasaba aquella especie de huevo de tan solo 5 cm. cada vez pesaba más, hasta el punto de no poder volver a levantarla. Se cree que aquel hombre pudo estar en pecado mortal ya que, al día siguiente, una joven volvió a encontrar la imagen y en esta ocasión sí que se dejó llevar.
La imagen pronto aumentó su fama de milagrosa hasta el punto de que el rey Felipe IV pidió que se la llevaran a la Corte pero, sabiendo la devoción que despertaba entre los vecinos, hizo que la devolvieran al lugar del hallazgo, pidiendo que se le construyera un Santuario para albergarla. El día 15 de Septiembre de cada año la Virgen de Cristal es sacada de su Santuario y llevada en procesión hasta la plaza de Villanueva de los Infantes donde se encuentra con otra procesión portadora de San Roque y San Sebastián. Acto seguido se le cantan canciones y se llevan a cabo bailes típicos.
Con una población de 259 habitantes, Villanueva de los Infantes fue municipio independiente hasta 1927 cuando pasó a formar parte del de Celanova, de más de 6.000 almas pero con solo 3.500 en su casco urbano. Como es habitual, en el interior de Galicia la población está muy diseminada y en el caso de Celanova se agruparon nada menos que 18 parroquias en una superficie de tan solo 67,31 Km2. La localidad se encuentra a 23 Km. de la ciudad de Orense. La torre que actualmente podemos contemplar, fue Torre del Homenaje de una fortaleza construida en el siglo XI sobre los restos de un castro celta. Aquel castillo jugó un importante papel en las guerras del siglo XII contra Portugal y, tras muchas vicisitudes, al final sería destruido a mediados del siglo XVII en lucha contra esos mismos enemigos quedando solamente la Torre en pie.
Alrededor de la Virgen de Cristal todo es misterio y misticismo ya que, además de no encontrar respuesta a la forma en que fue introducida en el huevo de cristal, se añade que la mires de donde la mires siempre se ve de frente. En cuanto a los bailes típicos, que se celebran el día de su procesión, es porque éstos danzarines acompañan a los santos Roque y Sebastián, patrones del gremio de zapateros. Los Santos esperan a la Virgen de Cristal a la entrada del pueblo y tras hacerle una solemne reverencia marchan todos juntos a la plaza principal donde le ofrecen los cantos y danzas. A mediados del siglo XVII la peste asediaba a los vecinos de Villanueva llevándose a la tumba a muchos de ellos.
En vista de tales desgracias los zapateros de la localidad le ofrecieron bailes a la Virgen y le enfermedad quedó controlada en pocos días. Desde entonces esta tradición pasa de padres a hijos y todos los años se llevan a cabo estos bailes que protegen a los vecinos de cualquier desgracia. En la actualidad, habiendo descendido el número de vecinos por su emigración a la capital provincial, se admite también la presencia de mujeres a unos actos que antaño eran solo para los hombres. De un tiempo a esta parte, entre la aceptación de mujeres en los ensayos y la tradición de ir todos juntos a tomarse unos vinos después, no faltan danzantes que mantengan la tradición. Y es que hasta Vírgenes y Santos agradecen algo de ayuda...
RAFAEL FABREGAT
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