30 de julio de 2012

0755- LA CULTURA DEL DESENFADO.

Nadie tiene la culpa de tener el gesto serio y de ser viejo y barrigón. Nació así hace demasiado tiempo, o así le hizo la vida y sus limitaciones. Aunque demasiadas veces no lo parezca, el fondo de muchos malcarados es alegre, generoso y desenfadado, lo que ocurre es que la vida da demasiados palos y algunos, pensando que no lo merecen, se vuelven retraídos, cerrados en sí mismos y más vigilantes de lo que es su natural formar de ser. ¿Cómo puede vivir así quien no es de esa manera?. Pues nada, resistiendo los embates de la vida y con la valentía necesaria para ello. Para el perfeccionista los palos son constantes porque los demás no son como él y todos piensan que la fórmula correcta es la suya. Vivir ya es de por sí un acto de valentía y más aún hacerlo en dirección contraria a la que utilizan los demás. Lo fácil es dejarse llevar, a favor de la corriente, sin pretender remontar. Primero por su dificultad y segundo porque no merece la pena. 

Demasiadas veces el premio es la mediocridad y claro, para acceder a eso ya estamos bien con lo que tenemos. Personalmente son muchas las personas que he tenido durante años en el lugar más alto del pedestal, del retablo de mis sentimientos, y más pronto que tarde se ha demostrado que no merecían el lugar que yo les había asignado. Cuando menos te lo esperas la vida te brinda la posibilidad de ponerles a prueba y siempre resultan estar por debajo de lo que en principio pensabas. Nadie merece estar en altar ninguno. Ante la ausencia de imágenes de Dios todas las demás sobran, porque los santos jamás han existido. Todos los que conocemos como santos, han sido políticos corruptos y avariciosos charlatanes de feria. Todos metidos en política, civil o eclesiástica, embaucadores de inocentes y charlatanes vendedores de humo. Esos son los santos que subieron a los altares y que todos conocemos.

Está claro pues que, para vivir bien, el mejor método es la cultura del desenfado. No todos pueden acceder a ella puesto que, para conseguirlo, hay que ser un tanto especial. Pero merece la pena intentarlo. Uno no puede evitar que le pongan zancadillas pero la respuesta correcta, si no tienes las armas adecuadas para responder de forma contundente, no es maldecir e intentar devolver la jugada a lo bruto. Lo inteligente es aparentar que pasas del sinvergüenza y esperar. Saber esperar es fundamental. Cuando alguien abusa de nosotros todos tendemos a enfadarnos, pero arreglar las cosas a la fuerza no es el mejor camino. Es preferible esperar y si es posible, hacerlo trabajando. Los nervios de la espera han hecho ricos a más de cuatro. Más pronto o más tarde es posible que la vida te dé la oportunidad de devolverle el "favor" al bellaco, incluso con intereses. Y si no se presenta la ocasión no pasa nada, mejor todavía, eso ganas en salud. 

La lucha pasiva es la más fina y la más insoportable para tus enemigos. 
Las personas de bien lo dan todo sin buscar nada a cambio. Sin embargo no son de piedra y sufren, más que los demás, porque nunca encuentran reciprocidad a sus sentimientos. 
Les preocupa la falta de amor de los demás, pero no saben qué hacer para conseguirlo. Parece que no esperen, pero esperan. 
¿Ignorantes?. Puede, pero no son tontos. Saben que no pueden confiar en los demás pero, aún así, confían. 
La persona de bien siempre está sola, no sabe de comedias, no encaja en una sociedad dedicada a la crítica del que pasa por la calle o del que marcha en primer lugar de una tertulia. 
No entiende el cinismo y la ruindad de quienes manejan según qué conversaciones. A menudo se le llama antisocial, porque solo hace autocrítica y quien le escucha no tiene donde agarrarse. 
Es la teoría del que te odia porque te envidia...















Las personas desenfadadas y sin mala intención, no encajan en la sociedad actual. A
 pesar de su enorme escasez, son insaciables de amor. Para colmo de males, el suyo no saben darlo con la efusividad necesaria para hacerse entender. Siempre temen molestar. De tanto esperar, no saben demostrar lo mucho que esperan. No duermen bien y en esas horas en vela piensan como salir de ese pozo en la que se hallan inmersos. 

Para ellos el túnel no tiene salida, porque la sociedad no es consciente de su necesidad. Ellos no aparentan necesitar nada y aunque te lo den todo, difícilmente puede nadie atenderles en una necesidad que se desconoce. Los demás los ven fuertes y hasta incluso superiores, en una realidad que solamente es virtual. Todo fachada, mientras su interior está demasiadas veces al borde del precipicio. Esa gente desenfadada en la que se puede confiar, que nunca te causará daño en conciencia y a la que ves fuerte y segura de sí misma,  también tiene sus debilidades y sus deficiencias. Nada es lo que parece. En la oscuridad de la noche, también el espanto ocupa sus pensamientos. No temen al diablo, pero tampoco creen en ningún dios al que puedan acogerse. A menudo ven más fantasmas que realidades, pues no creen en las personas que lo saben todo, ni en los que dicen que te amarán siempre. Ellos saben que la palabra eternidad siempre es una mentira piadosa. 

Es una utopía, como amar bajo la lluvia. La cultura del desenfado es tener amor y fe en los demás pero, en los tiempos que corren, ¿cómo tenerla sin estar loco?. 
El que confía en los demás, juega a coger el mar, a retener de por vida el amor, a resignarse ante la adversidad de una palabra injustamente pronunciada. 
En ese momento negativo por el que todos pasamos hay que valorar más que nunca el amor que los demás te dan.
Cuando caen las primeras gotas de lluvia el olor a tierra mojada impregna el ambiente y te lleva a recuerdos de juventud, a primeras experiencias nunca olvidadas... 
Al leve ruido que levanta el arroyo al escapar entre las piedras, al beso fugaz de tu primer amor, a la dulce sensación de complacencia tras una experiencia amorosa con la persona amada. 

Esas pequeñas cosas que algunos olvidan son justamente las más importantes, las que hacen que la vida merezca la pena. 
Si las recordásemos cada día al levantarnos, la cultura del desenfado sería general y haría posible la felicidad. 
La sonrisa presidiría nuestra cara a todas horas y todos los días del año pero, ¿hay alguna posibilidad de que eso pueda suceder?. 
Naturalmente ninguna, esa es nuestra cruz. 
Yo no sé si hay un Cielo al que acudir después de la muerte, pero de lo que si estoy seguro es de que al Infierno no iremos ya que, sin duda alguna, el Infierno es donde ahora estamos...

RAFAEL FABREGAT

29 de julio de 2012

0754- EL PODER DE ROMA.

Para hacer un breve resumen de la historia de la civilización romana, es obligado empezar por "los Etruscos". Se baraja la posibilidad de que sus orígenes fueran indo-europeos y que se instalaron en la península itálica allá por el siglo IX a.C., justamente en la región de la Toscana. La religión y la hechicería eran pilar importante de aquella cultura, casi primitiva, pero el pueblo etrusco estaba abierto a la modernidad que los pueblos mediterráneos representaban, 
especialmente griegos y fenicios que ya dominaban entonces las tierras que miraban al Mare Nostrum. Tres son las teorías que hay al respecto de su procedencia. Halicarnaso decía que el pueblo Etrusco era autóctono de la zona; otros aseguraban que eran Los Tursha, uno de los Pueblos del Mar; la tercera opinión era que llegaron del norte de Italia, mezcla de Italos y Raetii que penetraron en la península itálica alrededor del II milenio a.C.

De las tres opciones, la tesis más defendida por los historiadores es la autoctonía, aunque influenciada por Corintio y otros culturas orientales. 
Sea como fuere, aquellas gentes no estaban allí para perder el tiempo. Destacados comerciantes, querían prosperar y prosperaron. Pronto las chozas fueron abolidas y las casas de piedra se abrieron paso. 
Los conflictos iniciales entre las diferentes capas de esta sociedad variopinta dieron paso a la comunicación con las diferentes civilizaciones que dominaban entonces el Mediterráneo. 
Llegaron los intercambios comerciales y de hecho se han encontrado numerosas piezas etruscas, tanto en la colonia de Massalia (Marsella) como incluso en la península Ibérica, controladas entonces por los mercaderes fenicios y griegos. 
Del potencial de este pueblo, casi desconocido para la Historia, da buena fe el hecho de que los tres reyes anteriores a la Roma republicana, fueron etruscos.

La ciudad-estado de Roma fue fundada el 21 de Abril del año 753 a.C. y se achaca al héroe troyano Heneas aunque los datos son más mitológicos que reales. De su hijo Ascanio nacerían en el 752 a.C. los gemelos Rómulo y Remo, achacándose al segundo (Remo) la fundación de Roma como estado. Los autores clásicos nos dicen que, desde su fundación hasta la implantación de la república en el año 409 a.C., siete fueron los reyes de Roma. De la misma forma nos cuentan que los tres últimos fueron de origen etrusco:
(617-579 a.C.) - Lucio Tarquinio Prisco.
(579-535 a.C.) - Servio Tulio.
(535-509 a.C.) - Tarquinio el Soberbio.
Tras la expulsión de Tarquinio, el último rey etrusco, el Senado decidió abolir la monarquía y convirtió a Roma en una república, sistema de gobierno que perduraría hasta la ascensión al poder de César Augusto (27 a.C.) como primer emperador de Roma.


La época republicana no solo se limitó a consolidar el poder romano dentro de la península itálica, sino que lo proyectó fuera de ella. 
A mediados del siglo III, grandes enfrentamientos con Cartagineses y Macedonios llevaron a la derrota de éstos y la anexión de sus territorios por parte de Roma. Después dominaron Grecia, Pérgamo y otros territorios de Oriente Medio, en poder de los Seleúcidas. 
Como sucede en estos casos, los romanos no estaban preparados para mantener el dominio de tan vasto territorio y los problemas acabaron llegando. Entre la aristocracia romana se intensificaron las competencias por las diferentes magistraturas y se produjeron graves fracturas que llevaron a grandes guerras civiles que finalizarían con la destrucción de la República. Ese sería pues el detonante que llevaría a su última etapa, la del Imperio Romano, tras el que ya solo cabría la decadencia y su desaparición.

Con César Augusto comenzaba la nueva etapa del Imperio Romano, una época de esplendor y aún más expansión que dominaría la práctica totalidad de las tierras mediterráneas y aledañas. 
Pero César Augusto hizo más, mucho más. No solo consolidó el presente, sino que incluso dejaría sentadas las bases para la continuidad de este gran pueblo. 
Su figura sería ejemplo de generaciones futuras por lo que, su llegada al poder, trajo una paz que se mantendría durante más de tres siglos, prácticamente hasta el final del Imperio romano.
La historia del poder de la Roma occidental acabó en el año 476 d.C. de la misma forma que se dice empezara casi ocho siglos atrás. Casualidades de la Historia, fue fundada por un Rómulo en el 753 a.C. y desaparecía de la faz de la tierra por otro: Rómulo Augusto, un niño de 15 años que ni siquiera ostentaba poder alguno. 

Fue depuesto por Odoacro, caudillo de la tribu germánica de los Hérulos el cual, envió a Zenón de Constantinopla (emperador oriental romano) la corona de Rómulo y las insignias imperiales de occidente, con una carta en la que le pedía ser confirmado Dux de Italia. En evitación de males mayores, Zenón accedió a su petición y le dio el cargo de Patricio. Sin embargo el emperador oriental romano no olvidó nunca como había logrado el poder Odoacro y sus relaciones nunca fueron buenas. 
Trece años después (en el 489) Zenón apoyó a los ostrogodos de Teodorico el Grande que invadieron el reino de Odoacro forzándolo a rendirse en Rávena. Aquella misma noche, Teodorico organizó un gran banquete para celebrar la victoria y al que, para mayor burla, invitó al depuesto Odoacro. En mitad de la cena se dice que lo atravesó con su propia espada.

RAFAEL FABREGAT

27 de julio de 2012

0753- JAQUE MATE AL ALCALDE DE CABANES.

REEDICIÓN.
En el medievo se decía:
¡El rey ha muerto, viva el rey!.
Aquí, en nuestras tierras y con la vulgaridad que nos caracteriza, decimos aquello de:
¡A rey muerto, rey puesto!. Y la gente se queda tan ancha. Como si no hubiera pasado nada. ¡Pues si que ha pasado, sí!. Lo notaremos pronto y la oposición, que tanto se ríe, más aún...
Yo estimo a Paco, aunque apenas he hablado dos veces con él en mi vida. Me parece una gran persona, como siempre me lo parecieron sus padres. De buenos árboles, buenas astillas. Solo un fallo, por total inexperiencia, cual es el no haber sabido valorar (antes de aceptar el cargo) en el berengenal que se metía. Eso nos demuestra su inocencia, su falta de malicia y de intereses personales, hoy tan comunes.
¿Qué creías tú Paco, que era ser alcalde de Cabanes?. 
Si hubieras preguntado a gente que te aprecia, te lo hubieran dicho de inmediato. Para ser alcalde de Cabanes, además de valer, hay que tenerlos como ruedas de tractor, ser un pasota de tomo y lomo, o tener intereses propios. 

Para ser un pasota no merece la pena estar al frente de nada y aquí, como adelantes un pie más que el otro, ya te han echado a los leones. Yo no sé que es lo que pasa en el pueblo de al lado, seguramente lo mismo que en el nuestro, pero Cabanes no es justamente el paraíso, ni aún teniendo la mayoría absoluta. Aquí importa poco que hagas una cosa u otra, pues reina la política del joder por el solo gusto de hacerlo. Hay gente buena ¡claro está! pero los buenos no se meten en política y si lo hacen quieren pasar desapercibidos. ¡Te equivocaste Paco!. Tantos años en Castellón te hicieron olvidar como se las gastan por tu pueblo... ¡No te preocupes si algún desalmado te dice que no tuviste el corage suficiente!. No se trata de falta de corage y mucho menos de capacidad. Tu tienes las dos cosas, pero quieres emplearlas en mejores objetivos... pues te faltan las otras dos. Te sobran agallas para luchar contra la oposición, lo que no imaginaste jamás es que tendrías que luchar incluso contra los tuyos y eso, para la gente de bien, resulta excesivo.

No creo yo que, de ahora en adelante, la oposición lo tenga más fácil. 
Me han dicho que tenemos alcaldesa, ¡toda una Estrella!, simpática cuando quiere y cuando el que tiene delante, a su juicio, lo merezca. 
Quiere esto decir que, los que la conocen, la ven con las agallas suficientes para plantarle cara al propio diablo. Lo que sucede es que, tal como están las cosas, para plantarle cara al demonio hay que saber mucho y tener toda la información. 
En este momento, para ser alcalde casi hay que tener dos carreras y otros tantos masters, pero no estudios de andar por casa, no... Economía, ciencias políticas, urbanismo, derecho, etc. Y además tenerlos bien puestos, para poder plantarle cara a todo bicho que se ponga por delante. 

Hay demasiados "sabios" que no siempre emplean su sabiduría para bien. En fin, veremos en qué queda todo esto. La dureza me parece bien cuando sea necesaria pero, por una simple cuestión de proximidad, la cortesía y la amabilidad es algo inherente con el cargo que desempeña o debe desempeñar un alcalde de pueblo. 
Un alcalde debe serlo para todos, también para sus enemigos, cosa que muy pocos saben hacer. 
Desde luego, en Cabanes jamás ha habido una alcaldesa que así lo hiciera. El voto de confianza se da, o debe dársele, después ya se verá cuales son sus objetivos. 
Si es poner paz y orden en el corral, o ser el gallo del gallinero, que tal vez sea lo que Cabanes necesita... ¡Que esa es otra!. Porque aquí, el que no corre vuela.

Desde luego lo que todos reclamamos es orden y justicia igual para todos, que de listos vamos sobrados... Porque a la hora de manejar el látigo, la oposición no se queda atrás... 
La gente de la calle dice que la nueva alcaldesa tiene agallas y nos parece muy bien que las tenga. Solo hace falta que las emplee para bien del pueblo y de sus gentes. 
Que sepa, sobre todo, defender los intereses de Cabanes y no de los "listos" de turno que siempre están al acecho de lo que pueden chupar y nunca preparados para echar una mano. 
Que es muy fácil criticar, pero no lo es tanto aportar nuestro grano de arena. Hay grandes colas para pedir, pero pocos están dispuestos a aportar nada para el bien común. Claro que eso es defecto general...

Escribía hace bien poco de los daneses, primeros del mundo en cuanto a la valoración de sus políticos y de los impuestos que pagan. Y actúan así porque están convencidos de la honradez de sus gobernantes y porque saben que dichos impuestos redundarán en beneficio de todos. 
Sin impuestos no hay servicios, pero sin un gobierno justo no hay una correcta distribución. 
Mantener golfos no debe ser la prioridad de nadie. Al que no tenga trabajo que se lo busquen y el que no quiera trabajar que se quede en su casa, pero que no se aproveche del sudor de los demás y que sepa que los gastos son muchos y los precios de las cosas no creo que bajen.

Lo que no se puede hacer es que unos se maten a trabajar para que otros se lleven el dinero estando de cañas en el bar. Eso no hay nadie (de los que trabajan) que lo admita, porque son justamente antiguos males los que nos llevarán a modernos remedios. ¡Y ojalá que sea pronto!. 
Claro está que nadie puede trabajar a la fuerza y si lo hace, hará poco y mal hecho. El que trabaja tiene que hacerlo con el gusto de saber que, con su sudor, fomenta la viabilidad de la empresa que le paga la nómina, mantiene a su familia y aporta su granito de arena a la sociedad de la que forma parte y que después le corresponde con sus servicios. 
Y el que no quiera trabajar que no se preocupe... ¡No pasa nada!. De esos ha habido siempre, pero que no pida nada a los demás porque, se puede dar el caso, de que le manden a hacer gárgaras, por no decir palabras malsonantes...

RAFAEL FABREGAT

26 de julio de 2012

0752- MARAVILLAS SUBMARINAS, O NO...

Fiordos noruegos.

Como en tantas cosas de la vida, depende... 
¿De qué depende? -dice la canción. Pues naturalmente depende del lugar. 
Nada tienen que ver las plataformas oceánicas del Atlántico Norte con las paradisíacas del Pacífico Sur. Claro, es que... el tema es complicado, pero interesante y maravilloso para quien sabe y puede apreciarlo. 
Una cosa es bucear en los fondos marinos de los fiordos noruegos (?) y otra muy distinta hacerlo en Samoa o islas Salomón.
Yo bucear buceo poco. En la piscina y solo en el breve instante en que mis nietas me piden que me deje caer desde la escalerilla o desde la misma baranda. 
Aún así, me cuesta... 

Este no soy yo, en Papete.
Soy de secano ¡que le vamos a hacer!. Sin embargo siempre han llamado y mucho mi atención películas y documentales que nos muestran imágenes submarinas, repletas de peces multicolores; plantas o animales anclados a la misma piedra o al fondo marino; pecios de diferente interés y antigüedad, etc. Para mí siempre ha sido un tema apasionante, como lo son también las diferentes y maravillosas grutas que, en cualquier zona del planeta, muestran maravillas que le han costado al agua millones de años esculpir. Como supongo que ocurrirá a casi todos, nos pica la curiosidad y gustamos de lo que no es habitual en nuestras vidas y especialmente de lo que está fuera de nuestro alcance.

Maravillas de Beirut.
Sin embargo hay algunos afortunados que sí pueden disfrutarlo en plenitud, porque tienen capacidad y agallas para descender al fondo del mar o las grutas más profundas y tenebrosas. Eso es la aventura, una maravillosa experiencia a la que todos no podemos acceder. Yo no soy de esos que, cual zorra del cuento, dice que esas uvas no las quiero porque están verdes, o no me gustan porque para mí son inalcanzables. No, yo no soy así. A un servidor, curado de espanto, le importa un carajo lo que piensen los demás y cuando no tengo capacidad para algo, lo digo y me quedo tan ancho. Lo de ser el Guerrero del Antifaz es para otros fantasmas, yo ya tengo bastante con lo mío.

Tranquila, estos no muerden.
Las costas son muy diferentes y el fondo marino también. Esas diferencias son también las que propician o impiden el desarrollo de determinadas especies de fauna y flora marina. A un buen aficionado, debo suponer que le gusta todo, porque cualquier variante tiene sin duda su especial interés pero, para los profanos, los fondos del Pacífico Sur son los que parecen cumplir todas las expectativas, tanto desde el punto de vista de la pesca submarina como el simple hecho de bucear con el solo énfasis de admirar tan ricos lugares. Si la fauna de esa zona tropical es rica en peces de todas las especies y colores, la flora no es menos vistosa.

Mi primera vez... (en Asturias)
Los pescadores cazarán grandes langostas y sabrosos meros pero el verdadero aficionado, que no busca alimentarse de esa rica despensa, cazará también las más bellas imágenes en su cámara y las mostrará orgulloso a quienes compartan su misma afición. El agua llama nuestra atención porque agua somos y de ella venimos. El éxtasis llega con su sola contemplación. Unas verdes montañas son algo bello de contemplar, pero lo son más si tienen un río. Un simple riachuelo le da mayor vida y belleza si cabe a ese paisaje boscoso, a su vez repleto de pájaros, mariposas y otras formas de vida. Claro que hoy toca vida submarina, la que tanto me gusta, pero que tanto desconozco. Quien lea esto se preguntará seguramente, ante mi sinceridad, qué hago escribiendo de lo que no sé pero, ¡son tantas las cosas que admiramos aún sin conocerlas!.

Molina de Aragón
Yo, ante todo, soy un soñador. 
Un tipo raro que, en lugar de avergonzarse, presume de ello. 
Bastante barrigón, ya casi no voy a la playa. Soy de los que admiran el culto al cuerpo hoy tan de moda pero que nunca pudo conseguirlo, porque yo delgado, no lo fui ni cuando el pan escaseaba. 
Claro que entonces no había gimnasios... pero sí azadas y arados, que sin duda empleé. 
Yo no creo abusar de la comida y menos aún de la bebida pero, si los genes son propicios, cuando uno se hace mayor y deja de trabajar todo es demasiado y los genes se abren paso. 
Envidio pues a esa juventud que no duda en machacarse diariamente en un gimnasio, para conseguir estar bien consigo misma, física y psíquicamente...


Can Bossa (Ibiza)
Como las maravillas submarinas y los frondosos bosques con río, vengan de donde vengan, las imágenes bellas siempre se agradecen. 
Miente quien dice que cualquier cosa le gusta.
Hombre, cuando uno se hace viejo, lo que tiene a su alrededor casi todo lo es y poco puedes exigir si tu mismo eres un trasto pero, cuando uno era joven y aún sin ser un Adonis, pretendió llevarse (y se llevó) a su huerto a lo mejorcito que había por el barrio.
De hecho la de la foto ya me había dado dos hijas en el momento del "clic". Había ganado ya unos kilitos pero seguía guapa y aún sigue hoy... 
De todas formas, entonces la delgadez no estaba tan de moda. Y es que no solo triunfan los Adonis. 
Cuando uno es joven no tiene que conformarse con lo primero que pasa por la acera, ni tiene que intimidarse ante la belleza. El que la sigue, la consigue y... si es lanzadito, más aún.

RAFAEL FABREGAT

0751- EL TRIÁNGULO DEL DIABLO.

Poco hay que añadir a lo que todo el mundo conoce. El Triángulo de las Bermudas es el espacio que se forma trazando una línea perimétrica entre la isla de Puerto Rico, Melbourne (Florida) y las islas Bermudas. Ronda los 4 millones de Km2. de superficie oceánica y solo en la segunda mitad del último siglo a significado la desaparición de más de 50 barcos y unos 25 aviones, sin que hubiera explicación racional ninguna. 
Para los que no creemos en fenómenos extraterrestres ni en misterios de ninguna clase, cabe buscar una explicación, un motivo racional que nos pueda aportar luz a este fenómeno, cuanto menos extraño.

Los hechos sucedidos no los vamos a relatar pues ya se han contado cientos de veces, sin contar que hay además novelas y películas que nos lo han mostrado de todas las formas posibles. Lo que reclamamos es alguna aclaración al respecto de este fenómeno. También se han dado muchas, pero es obligado reflejarlas y que cada cual piense lo que considere oportuno...
Los científicos nos cuentan que una de las causas probables en el hundimiento de barcos puede deberse a la extraordinaria producción de gas metano en las profundidades de esa zona concreta, debida a la alta concentración de materia orgánica en descomposición. Por causas que se desconocen, en algunas ocasiones el gas se acumula en las profundidades y cuando sube a la superficie lo hace en grandes burbujas que producen fenómenos marítimos importantes como maremotos o grandes remolinos en los que cualquier embarcación puede verse seriamente comprometida. Sin embargo no parece, en principio, que esto tenga nada que ver con el tema de la navegación aérea...

Eliminando los portales que dicen llevar a otras dimensiones (!) los agujeros de gusano y otras tonterías por el estilo, ¿qué otra explicación podríamos dar?. 
A su salida a la superficie del mar, ¿puede esa misma combinación de gases y oxígeno variar las condiciones atmosféricas y causar un serio problema a cualquier avión que pase en ese momento por allí?. 
Están claros al parecer los problemas de radio por estática y otros fenómenos que entorpecen las señales de los aparatos de a bordo pero ¿siendo conocida esta problemática no pudo corregirse con una cierta facilidad?. 
Pues bien, parece que no. La comunidad científica internacional ha llegado a la conclusión que ese y no otro es el misterioso elemento que puede, en un momento dado, causar tan grave estropicio. 
Bien por el metano antes citado o bien por gases de origen volcánico o por la unión de ambos. 
Sea como fuere las enormes bolsas de gas parece ser que existen, han sido detectadas y se ha constatado que éstas son eyectadas a la superficie con cierta frecuencia y fuerza descomunal.

Cualquier barco que pasase en este momento por ese punto podría ser fácilmente hundido y, en el caso de los aviones, parece ser que los aparatos tecnológicos con los que impactara la burbuja de gas tampoco están preparados, o no lo estaban entonces, para soportar este fenómeno natural. Los científicos quizá no tengan una explicación exacta del fenómeno, pero sí de las consecuencias que puede provocar y provoca. Lo que, en cualquier caso está aclarado es que de todos aquellos fenómenos extraterrestres de los que tanto se habló y se escribió en décadas pasadas, nada de nada. La cruda realidad, por desconocida, dio paso a la leyenda y ésta a la imaginación.

Todos los que han visto el fenómeno no han muerto, pero mejor dar un rodeo... Dicen haber experimentado un caos inexplicable en los instrumentos de a bordo que les impedían saber donde estaban ni la dirección que llevaba la nave, sin que pudieran comunicarse por radio. Si hay suerte y puedes salir de esa zona turbulenta, poco a poco los instrumentos recobran su actividad habitual, pero nadie osa repetir el paso por la zona.
Han pasado más de sesenta años desde las primeras noticias del misterioso fenómeno pero, finalmente, hay una explicación lógica y científica para el mismo. De todas formas imagino que puntos como este los habrá en otras partes del planeta y allí habrán naufragado otros barcos y habrán caído otros aviones pero, por el motivo que sea, no se hicieron tan famosos.
Como se ha dicho montones de veces hay otros mundos sÍ, pero están en éste.

RAFAEL FABREGAT






25 de julio de 2012

0750- OSETIA DEL SUR.

Desde luego no es uno de los países más conocidos. Osetia del Sur es una República situada en el Cáucaso y solo reconocida por poco más de media docena de países. De hecho, durante la época de la URSS no era más que una comunidad autónoma de la República Socialista de Georgia pero en 1.991 declaró su independencia de facto, que ni la propia Georgia reconoce. En Agosto de 2.008 y tras su segunda guerra con Georgia, Rusia fue el primer país en reconocer su independencia, reconocimiento al que se sumaron Nicaragua, Venezuela, Tuvalu, Abjasia y Nauru. Se trata de un pequeño país de apenas 3.900 Km2. y menos de 80.000 habitantes al que familiarmente se le conoce como Alania y que parece ser que es el lugar originario de los Alanos, uno de los pueblos bárbaros que invadió la península Ibérica a partir del siglo III de nuestra Era. Algo más de un tercio de la población vive en la capital (Tsjinval) y de la industria maderera y sus manufacturados.

Debe su nombre a los Osetas, pueblo de origen iraní que emigró hacia los territorios del Cáucaso Norte a través de Armenia. Su lengua procede de los dialectos escitas de la antigüedad, hasta el punto de que nada tiene que ver con la de sus convecinos los Alanos. La lengua oseta trasciende fronteras y se habla no solo en buena parte de Georgia, sino incluso en las regiones rusas próximas.  Tras la I Guerra Mundial los osetios ya expresaron su deseo de incorporarse a la URSS pero fueron seriamente reprimidos por Georgia. Sin embargo en 1.922 Stalin les declaró Región Autónoma de Georgia. El 10 de Noviembre de 1.989 el Congreso de Diputados de la región proclama su conversión en República Autónoma, aunque el Parlamento de Georgia lo declara inconstitucional. El 20 de Septiembre de 1.990 los diputados de Osetia proclaman la soberanía y creación de la República de Osetia del Sur, con capital en Tsjinval, a lo que el Parlamento de Georgia responde inmediatamente anulando su autonomía. De inmediato estallan los enfrentamientos y Georgia declara el estado de excepción.

En 1.991 las tropas de Georgia intentan entrar en Tsjinval, la capital, enfrentándose duramente con las milicias osetas, lo que da inicio a una guerra que durará dos años y que causará casi dos mil muertos y el éxodo de más de 5.000 personas. En Julio de 1.992 Rusia y Georgia firman un acuerdo que pone fin al conflicto. Pese a las protestas georgianas, en Noviembre de 1.996 Osetia del Sur celebra elecciones presidenciales y en 2.006 un referéndum donde el 99% votó a favor de la independencia de Georgia y su anexión a Osetia del Norte y Rusia. En Agosto de 2.008 Georgia ataca Osetia del Sur y a las tropas de paz rusas instaladas en la región, pero Rusia envía rápidamente refuerzos y los georgianos son obligados a retirarse. A finales del mismo mes todas las partes implicadas aceptaron el alto el fuego. También Abjasia había participado en el conflicto por lo que, con el apoyo de Rusia, se evitó la reconquista de estos territorios por parte de Georgia y la creación de un "escudo independiente" que garantiza la seguridad rusa.

Situada en el corazón del Cáucaso, Osetia del Sur es extraordinariamente montañosa y sin acceso al mar, aunque en su territorio tiene varios lagos. El más importante de ellos es el Kelistba, situado en la meseta de Kelskom, a 2.921 metros de altura sobre el nivel del mar; tiene una superficie de 128 hectáreas y una profundidad máxima de 75 metros.
Tras su guerra con Georgia el país tiene muchos problemas económicos ya que falta trabajo y los suministros son limitados. La mayor parte de la población sobrevive gracias a una agricultura de subsistencia, siendo el principal ingreso del país (30%) el control del Túnel de Roki, punto de conexión entre Georgia y Rusia. El PIB de Osetia es de 15 millones de dólares USA, 250 dólares per cápita. La población es oseta en un 70% (56.000h.) el 25% (20.000h.) georgiana y un 5% aproximadamente de otras procedencias. Mayoritariamente son cristianos ortodoxos, con un pequeño porcentaje de apostólicos armenios o gregorianos que dicen ser la iglesia más antigua, fundada en Artaxata (Armenia) el año 43 por los discípulos de Jesús, Judas Tadeo y Bartolomé.

EL ÚLTIMO CONDILL


   

24 de julio de 2012

0749- REINO DE DINAMARCA.


Reino del norte de Europa, integrado por tres territorios autónomos perfectamente diferenciados: la propia Dinamarca y sus territorios de ultramar que son las Islas Feroe y Groenlandia. Ocupa un total de 43.098 Km2 y tiene cerca de 6 millones de habitantes. Su capital y ciudad más poblada es Copenhague, que está situada en la isla de Selandia. El territorio de Dinamarca está compuesto por la península de Jutlandia y un total de 407 islas, de las cuales solo están habitadas 79 de ellas. La península está unida al continente europeo al hacer frontera con Alemania. El resto está totalmente rodeado por las aguas del mar del Norte y del mar Báltico. Dinamarca es la puerta natural que apenas permite al mar Báltico entrar en contacto con el mar del Norte y océano Atlántico, motivo por el cual el Báltico es un mar prácticamente cerrado y de muy baja salinidad, puesto que son varios los ríos importantes que en él desembocan.

Desde 1.999 Dinamarca está unida a Suecia por medio del Puente de Oresund, de 15,41 Km. de largo. Se trata de un doble túnel, inicialmente sumergido y después elevado, que soporta una doble vía férrea y una autopista de tres carriles en cada dirección. El tramo sumergido está en la parte danesa y ocupa un total de 3,51 Km., hasta la isla artificial de Peberholm creada al efecto. Allí Oresund sale a la superficie y recorre sobre la isla algo más de 4 Km. para después deslizarse sobre las aguas en un puente espectacular de 7.845 m. El mayor éxito de esta vía de comunicación es la línea férrea puesto que el billete de tren es más barato que el peaje que paga un automóvil. En el tramo de puente, las líneas de ferrocarril transcurren por debajo de la autopista pero, aún así, el puente tiene una altura libre de 57 metros. De todas formas la mayor parte de los barcos suelen cruzar por el estrecho de Drogden, o sea, allí por donde el Oresund viaja sumergido.

Dinamarca fue tierra de Vikingos, aunque mayormente procedieran de los países nórdicos como Suecia, Noruega y hasta Islandia. Todos estos países tenían valerosos guerreros del mar que las gentes del centro y sur de Europa llamaba con el mismo nombre. Hacia el año 800 de nuestra Era los Vikingos sembraron el terror en casi toda Europa. Principalmente navegantes, dirigían sus principales incursiones a las ciudades costeras o las interiores con ríos navegables.  Los vikingos daneses realizaron asentamientos en el País Vasco y también sus expediciones por el Mediterráneo se hicieron frecuentes. Por el norte llegaron a colonizar buena parte de Rusia, Normandía, Inglaterra y posteriormente, rodeando la península Ibérica, atacaron Lisboa, Sevilla y fundaron el reino de Sicilia. El 844 quemaron Sevilla, entonces gobernada por el emir de Córdoba y posteriormente intentaron saquear Roma. Aunque sin conocimientos geográficos, llegaron a Constantinopla sitiándola. La era vikinga se entiende finalizada en 1.066 con la muerte del rey Haralt el Despiadado, en la Batalla de Stamford, cuando pretendía dominar totalmente Inglaterra.

Margarita II
Controladora ocasional de todos los países de la región, tras las revoluciones europeas de 1.848 Dinamarca se convirtió en una monarquía Constitucional el 5 de Junio de 1.849. Tras la Guerra de los Ducados (1864) Dinamarca fue obligada a ceder Slechleswin-Hostein a Prusia en una derrota que marcó para siempre su identidad nacional. Desde entonces el país adoptó siempre políticas de paz y neutralidad, que mantuvo en la primera y en la segunda Guerra Mundial. A pesar de ello, en 1.942 Alemania invadió su territorio, aunque los daneses se rindieron sin derramar una sola gota de sangre. Como recompensa Alemania respetó su autonomía y permitió la salida de su comunidad judía. Finalmente se levantó alguna hostilidad y se llevaron a cabo algunas labores de sabotaje. Tras la victoria de los aliados, en 1.945 los alemanes abandonaron el territorio. A partir de 1.947 y bajo el reinado de Federico IX el país se convirtió en miembro de la OTAN y posteriormente de la Comunidad Económica Europea. Sin hijos varones propuso en 1.953 un referéndum para suprimir la Ley Sálica que fue aprobado por el pueblo. Tras su muerte en 1.972 su hija Margarita ascendió al trono.

Príncipes herederos daneses.
El soberano actual es Margarita II, primogénita de Federico IX y de Ingrid de Suecia. Reina sobre uno de los países más desarrollados del mundo, modelo de bienestar y de protección social. A diferencia de otros países de la Comunidad Europea, en Dinamarca todos los partidos políticos apoyan este sistema universal de educación, salud y protección social, independientemente del lugar que cada ciudadano ocupe en la sociedad, lo que hace que toda la ciudadanía tenga un alto grado de confianza en las instituciones políticas y en la democracia en general. Según encuesta de SoCap Internattional, la sociedad danesa es la que más confía en el prójimo y en sus políticos, lo que hace que estén totalmente de acuerdo con los impuestos fijados por el gobierno, en la seguridad de estar correctamente manejados para beneficio de todos. Cuando en el año 2.007 se anunciaron rebajas en los impuestos se convocaron huelgas y grandes manifestaciones populares en contra de la medida. Sin duda tal disconformidad se basaría en la creencia de que tales medidas eliminarían parte de los servicios que hasta entonces disfrutaban.
Desde luego, en España esas cosas no pasan...

EL ÚLTIMO CONDILL

0748- RECORDAR ES VIVIR DOS VECES.

Sí, sí, esa es mi mujer con 17 años. 
Un monumento, por cierto. Con 20 años mis padres me habían comprado en Octubre de 1.970 un SEAT-600D (de ocasión) para poder hacer la "mili" con la comodidad de no depender de nadie a la hora de ir y venir del Cuartel Tetuan-14 de Castellón. Allí me había sacado el pase "pernocta", el cual te permitía marcharte a tu casa al mediodía, siempre y cuando no tuvieras servicio alguno. El "600" cumplió su cometido y llegó en buenas condiciones al día de mi boda, en Diciembre de 1.973, cuando prestó el más importante de sus cometidos al ser portador de la enamorada pareja que decidió pasar su "luna de miel" en viaje por Andalucía. Almería, Málaga, Granada, Sevilla, Córdoba, Jaén y en Linares ¡plaf!. Allí se reventó la "bomba de agua" y, con la cartera bastante mermada, se impuso el regreso "ipso facto". 
Cambiada la pieza, el SEAT-600D siguió dándonos satisfacciones algunos años más pero llegó un momento en que, aunque el motor no se entregó nunca, el chasis estaba destrozado y los arreglos de bajos que se intentaron no servían para nada. Finalmente se vendió por 10.000 pesetas (60 euros).

La suerte no mejoró ya que al vender el "600" compré en Castellón un SEAT-1430, todo un cochazo más viejo si cabe que el anterior y a mitad de camino subiéndolo al pueblo, ya se me soltó el palier y tuve que llevarlo al taller. 
Este coche lo "mantuve", nunca mejor dicho, durante dos años... 
Cada día que lo sacaba de casa tenía uno u otro problemilla que arreglar y al final tuve que venderlo.
Siempre había oído decir que el mejor coche era la marca "nuevo" y haciendo caso a mis mayores y aceptando una pequeña ayuda de su parte en 1.977 compré un RENAUTL-5TL, un cochecito pequeño pero con potencia y buenas prestaciones. 
Para entonces teníamos ya a nuestra hija Montse con dos añitos.

El estreno, ya que nos dieron la ayuda y por aquello de que mi madrastra se llamaba Pilar, fue llevar a mis padres a Zaragoza y de paso, también a ver el Monasterio de Piedra.
El viaje de ida fue relativamente bueno, pero estábamos en pleno verano y aquellos coches de entonces no tenían aire acondicionado. 
Mi mujer y yo delante y mis padres y la niña detrás, el cochecillo subió con una cierta alegría las cuestas del Puerto de Querol, previo a Morella y el de Puertomiró después, pero el motor se calentó un poquito. 
Ya coronado este segundo puerto paramos a descansar. Estiramos las piernas y el motor refrescó. 
Después ya prácticamente de bajada el R-5 recobró la alegría y nosotros también. Comida en Alcañiz y seguimos hasta la capital aragonesa.



















Después de tomar habitación en el hotel descansamos un rato y a media tarde visitamos la Basílica del Pilar, la Seo y, como no, el famoso Puente de Piedra sobre el río Ebro. Tras la cena los viejos se fueron a descansar y los jóvenes dimos una segunda vuelta por los alrededores ya que, durante el servicio militar, yo había estado dos semanas de maniobras en Zaragoza y conocía algunos lugares donde tomar una copa. No regresamos tarde al hotel pues también nosotros estábamos cansados.


A la mañana siguiente, con apenas un café con leche en el estómago emprendimos la marcha en busca del famoso Monasterio de Piedra. Mi madrastra había comprado jamón y queso así como unas barras de pan, con la intención de almorzar por el camino. Como es frecuente en los veranos de la provincia zaragozana, se había levantado la mañana con un "poniente" infernal. Tanto era así que, con el coche cargado hasta los topes y con un sol abrasador, era imposible viajar con los cristales bajados pues se notaba mucho más fresco ir con las ventanillas cerradas que permitir la entrada de aquel aire que parecía venir de algún desierto cercano. En un momento dado paramos a comer bajo unos frondosos olmos que había junto a una acequia un poco retirados de la carretera. El viento, como digo, era abrasador. Tanto que al sacar las viandas el papel que envolvía el jamón eran una mancha de aceite y el jamón, pringoso, no podía cortarse con el cuchillo. 

Por aquel entonces lo de los bares de carretera brillaba por su ausencia y mucho más en esas tierras de poco tráfico y mucha escasez. No hicimos mucho tiempo en un almuerzo que nada tenía de deleite. El motor del coche, a pesar de ser nuevo, llegó a calentarse puesto que el agua ya llegaba al radiador recalentada y no cumplía sus funciones de refrigeración.
Tras varias paradas llegamos al citado Monasterio de Piedra. Mi mujer y yo ya habíamos estado y, como he dicho antes, el viaje no tenía otra misión que la de cumplir el sueño de mis mayores. La visita en ese lugar siempre es agradable y ese día de tanto calor más todavía puesto que significaba un refresco importante del entorno de tan abundante manantial. Visitamos las instalaciones y con ello se hizo la una de la tarde. Sin embargo había poca hambre y decidimos emprender el camino de regreso hacia Castellón con parada para comer en algún pueblo próximo.

Llegados a las dos de la tarde paramos en el primer pueblo que encontramos. Solo había un bar y no tenía comida de ningún tipo. Seguimos bajando y ya casi a las tres de la tarde volvimos a parar en otro pueblo mayor. A la entrada del mismo un letrero de Pepsi-Cola nos advirtió que la casa era un bar. Levantamos el cañizo que protegía la puerta y efectivamente allí había media docena de viejos jugando una partida de cartas. Preguntamos sobre la posibilidad de comer y nos dijeron que en toda la comarca no era costumbre hacer comida en los bares, pero que fuéramos a la "fonda" que allí nos atenderían. Preguntamos por el paradero de tan especializado local y con las señas aprendidas nos encaminamos hacia allí. No es necesario decir en un día de esas características, como estábamos los cinco a esas horas de la tarde. Hambre y sed se mezclaban y nuestro aspecto no era sin duda el mejor para gentes que, de una u otra manera, estaban haciendo turismo.

La fonda era una casita de pueblo como las demás, en la que nadie hubiera podido adivinar el oficio que desempeñaba. 
Planta baja y una altura. Portón partido en horizontal, como entonces se estilaba en los viejos pueblos. La mitad de abajo cerrado con un cerrojo de hierro y la de arriba abierta de par en par, tras el correspondiente cañizo. 
A nuestra llamada una señora de mediana edad salió secándose las manos en su delantal.
- Buenas tardes señora. Venimos de visitar el Monasterio de Piedra y queríamos comer. En el bar del pueblo nos han dicho que usted podría atendernos.
- Pasen pasen -respondió la buena señora amilanada por nuestro aspecto ajado y sudoroso. 

A la izquierda de aquella rústica entrada, un pequeño cuartito hacía las veces de comedor y de salita. No había mesa alguna para comer, solo media docena de sillas y una mesa camilla vestida con una tela de flores multicolor y sobre ella un mantelito de ganchillo sobre el que descansaba un viejo pick-up y tres o cuatro discos. (?)
- ¿Quieren que les ponga un poco de música? -preguntó amable la señora.
- No gracias. No se preocupe. Estamos lejos de casa y solo queremos reponer un poco las fuerzas y salir lo más pronto posible. 
- ¿Tiene agua fresca? -preguntamos.
- Claro, claro, enseguida. Pero no tengo nevera... a ver... es que es bastante raro que en esta época del año venga alguien por la posada, así que... ¡no tengo gran cosa!. En cuanto a la comida... lo único que puedo prepararles son unos chorizos de nuestra matanza y unos huevos fritos que le compro aquí a una vecina... también algo de la carne que metemos en aceite y...
- Perfecto señora, perfecto... ¡Con eso ya nos arreglamos!.
- Pero siéntense, siéntense -dijo ella amable.

A los diez minutos salió la señora con un plato de ensalada descomunal. 
Lechuga, tomates, cebollas y algo que parecían olivas pero que resultaron ser "prunas" jóvenes que, a falta de olivos, allí recogen verdes a medio desarrollar y las ponen en vinagre para posterior uso en ensaladas. 
Como complemento una hogaza de pan casero que pesaría kilo y medio... 
A los pocos minutos llegó nuevamente con dos fuentes llenas de chorizos caseros fritos, morcillas, trozos de costilla de cerdo en adobo y huevos fritos. 
Nos servimos, allí había comida en abundancia para todos. ¡Como nos vería aquella mujer de desesperados!.
- Señora -preguntó mi padre- ¿No tiene vino?.
- Sí señor, pero no es embotellado. Tengo un clarete que hacemos con nuestra uva y que guardo en un tonel de 200 litros en el corral... Un momento que ahora les saco el porrón...
- ¡Jesucristo bendito!. 

Desde luego Dios estaba con nosotros. El agua era de una fuente cercana que brotaba fresca cual sacada del mejor frigorífico pero el vino no estaba menos fresco y sabía como los ángeles, si es que éstos saben a algo...
Como aquellos chorizos, nunca los he comido mejores. Y la carne, los huevos, el pan, el vino... ¡Dios mío, que comida!. El hambre que traíamos sin duda influiría en el disfrute pero, realmente todo estaba espectacularmente bueno. 
El porrón tuvo que ser llenado una segunda vez... Bien comidos y bien bebidos se imponía iniciar el regreso.
- Mire que es lo que le debemos, señora.
- No sé... -la señora dudaba- Está todo muy caro y... ¡Denme 80 pesetas!

- Pero... ¿Cuanto ha dicho? -le respondí sorprendido.
- Es que... yo tengo que comprarlo todo y...

- Calle, calle, la corté. ¡Tome usted!. Un billete de 100 pesetas y quédese con la vuelta.
La señora, con una sonrisa de oreja a oreja, nos acompañó al coche y bendijo nuestra llegada a su casa. A modo de despedida nos emplazó a que volviéramos por allí si es que algún día regresábamos por aquellas tierras. Naturalmente la visita no se repitió.
Con las barrigas llenas y el R-5 descansado emprendimos nuevamente el regreso a casa. A media tarde el sol había descendido y había cesado el viento de poniente. El ambiente refrescó notablemente y la caída de la noche nos pilló todavía por el camino. En un momento dado les pregunté a mis padres que les había parecido.
- Muy bueno y muy barato -dijo mi padre.
- Me refiero al viaje -le dije aclarando que no me refería a la comida.
- ¡Ah, bueno también, pero la comida...! Los efluvios del clarete seguían haciendo su efecto.
La llegada a Cabanes fue pasadas las 11 de la noche, sin cenar pero sin necesitarlo...

RAFAEL FABREGAT