31 de agosto de 2011

0476- TEORIAS SOBRE LA EVOLUCION.


Las cadenas de televisión y especialmente los canales temáticos, nos bombardean diariamente con documentales que nos muestran el pasado y el presente de nuestro planeta, su historia geográfica y política.
Hasta incluso nos muestran los confines de un Universo que nadie ha visto, ni creo que pueda verse nunca. Para colmo de alegría informativa hasta incluso se atreven a anticiparnos el futuro de nuestra especie y del planeta.
Si conocer el pasado ya es bastante difícil, imagínense lo que tiene que ser el saber lo que va a ocurrir mañana. Imposible, ¿verdad?. Pues se volverían ustedes locos si supieran los miles de personas que consultan -cada día- a brujas y chamanes su futuro y hasta incluso el de sus enemigos.

El motivo no es otro que la ignorancia y la insensatez. Millones de personas no se han enterado todavía de que estamos en el siglo XXI y no lo han hecho por la sencilla razón de que ellos han quedado anclados a décadas e incluso a siglos anteriores. No es torpeza de su parte, sino miseria y falta de cultura, solo achacables a lo inaccesible del territorio que ocupan o a los pésimos gobiernos que ha sufrido la región que habitan. 

Aunque la tecnología es algo relativamente reciente, queda claro que las zonas subdesarrolladas de África, Asia o América central lo son, en gran medida, por culpa de sus gobernantes. 
Muchos de esos países tienen grandes riquezas naturales sin explotar o controladas por cuatro facinerosos, mientras el pueblo malvive por montañas y valles, al amparo de tres cabras y dos gallinas, o saliendo a la selva a cazar.
Muchas veces nos preguntamos, por qué el mundo habitable siempre se nos ha presentado habitado. 
Salvo alguna pequeña isla, que también puede tener indicios de haber cobijado vidas que hoy no tiene, el resto de los territorios descubiertos siempre se han revelado ya ocupados por otras gentes y razas. 


A pesar de lo atrasado de la civilización y la supuesta imposibilidad de cruzar los mares que les permitieran llegar a esos destinos, el nuevo territorio siempre estaba habitado. ¿Cómo se explica esta realidad?. ¿Nos dejó alguien caer desde el cielo, bien repartidos por toda la tierra cual si de semillas de gramíneas se tratara?.

Los paleontólogos nos dicen que los humanos descendemos de una especie de primates que iniciaron su andar por la tierra alrededor de 65 millones de años atrás. 
Como todos sabemos, hay muchas otras clases de primates que no evolucionaron. Por lo tanto, puede que seamos primates pero de una raza totalmente diferente. 
Nada tenemos que ver con aquellos que quedaron anclados a su forma de vida primitiva.
Aún así, esta separación entre el primate y los primeros homínidos, apenas hace 6/8 millones de años que se produjo. No podemos achacar a la comunicación entre continentes el hecho de que los homínidos estuvieran repartidos por todo el planeta. ¿Qué ocurrió pues, para que así fuera?. 

Como tantas cosas, la prehistoria es también una ciencia con demasiados interrogantes para los que no hay respuestas concretas. Nadie sabe a ciencia cierta donde, como y cuando el primate dejó de serlo, para convertirse en homínido y menos todavía de donde salió aquel.
De todas formas, aunque lo supiéramos, la pregunta seguiría en el aire. ¿Cómo nos repartimos por el planeta y muy especialmente a zonas de todo punto inaccesibles en aquellos tiempos?. 
En el caso de que nuestra aparición en el mundo fuera general -que es lo más probable- la explicación estaría realizada; como también quedaría hecha si la raza de la que partimos, aunque fuéramos simples gusanos, ya estaba repartida por el mundo cuando los continentes eran uno solo.

Lo más racional sería pensar que la evolución animal del planeta, como la botánica, fue uniforme en principio y posteriormente desarrollada según las particularidades de la zona en la que cada grupo quedó anclado. 
Puede ser tan fácil como pensar que, si en un principio, todos los continentes eran uno solo y son ellos quienes han ido separándose, aquellos primeros seres vivos de los que descendemos poblaban todo aquello que las condiciones naturales permitían. 
Posteriormente, al irse separando los continentes, el tiempo fue desarrollando las especies a diferente velocidad, según las condiciones del territorio que ocupaban. 
Es más, los que saben, aseguran que los continentes siguen en movimiento y se prevé que dentro de millones de años volverán a ser uno solo, como lo fueron en principio...
Todo teorías. No sé lo que creerán ustedes pero yo... ¡Si no lo veo...!

RAFAEL FABREGAT

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